Competencia frena la venta de Nowo, la filial lusa de MásMóvil que dirige Arturo Dopico
La autoridad de competencia de Portugal considera insuficientes los 'remedies' propuestos por Vodafone el pasado diciembre, básicamente, ceder espectro a Digi, por lo que tendrá que plantear una nueva propuesta o desistir de comprar la filial de MásMóvil
La Autoridad de Competencia de Portugal (AdC) ha rechazado la venta del negocio luso de MásMóvil a Vodafone, una operación acordada en septiembre de 2022 y con la que la dueña de R pretendía obtener liquidez para la fusión con Orange en España y ahorrarse las inversiones necesarias para la expansión de Nowo, su filial en el país vecino. El superregulador ve insuficiente el paquete de remedies propuesto por el operador británico el pasado diciembre y que consistía en entregar derechos de uso del espectro en las bandas de 1.800 Mhz y 3.400-3.800 Mhz a Digi, además de darle acceso bitstream mayorista a su red de fibra óptica.
Competencia ve insuficiente esta propuesta. Aunque todavía no ha hecho pública la decisión, adelantada por Jornal de Negocios, ha sido la propia Vodafone quien ha confirmado la negativa. «Vodafone tuvo conocimiento de la decisión de la Autoridad de Competencia en relación a los compromisos presentados en el marco de la operación de adquisición de Nowo, encontrándose ahora analizando las consecuencias de esa decisión», señaló la operadora, que en España está en proceso de venta a Zegona.
A priori, las opciones para Nowo y Vodafone son dos: presentar una nueva propuesta con otros remedies o cancelar definitivamente la operación. La filial portuguesa de MásMóvil está dirigida por Arturo Dopico, quien fuera el primer ejecutivo de la cablera gallega R durante 18 años. El directivo salió de la empresa coincidiendo con la venta a Grupo Euskaltel y regresó, de manera indirecta, con la compra de la operadora vasca por parte del grupo que dirige Meinrad Spenger. Este medio consultó a MásMóvil sobre la situación de Nowo tras la negativa de Competencia, pero no pudo responder de manera inmediata.
El accidentado viaje portugués de MásMóvil
Los planes de la teleco para el negocio portugués distan mucho de los que se imaginaba en 2021, cuando invirtió 70 millones en la subasta de espectro 4G y 5G que celebró Anacom y que se prolongó durante nueve meses. La irrupción de Digi encareció los paquetes y, sobre todo, dejó un mercado más competitivo y complejo de lo previsto, pues sumó un quinto operador al tablero. Previamente, el escenario apuntaba a tres grandes operadores: MEO, NOS y Vodafone, con Nowo robando clientes por precio.
Este problema se sumó a la necesidad de invertir para desplegar su red en un momento en el que la operación de fusión con Orange se convirtió en prioritaria. Fue entonces cuando MásMóvil decidió vender el negocio que dirige Arturo Dopico a Vodafone. Como sucedió con Orange en España, la propia Digi sirvió para cuadrar un paquete de remedies que, sin embargo, ahora Competencia no considera suficientes.