CIG y Sindicato Labrego instan a la Xunta a enviar al Consello de Medio Ambiente el informe sobre la planta de Altri
Las organizaciones piden al Ejecutivo autonómico que "cumpla proactivamente con sus responsabilidades como órgano consultivo de la Consellería de Medio Ambiente"
La CIG y el Sindicato Labrego reclaman a la Xunta que envíe el informe elaborado por la Consellería de Medio Ambiente al Consello Galego de Medio Ambiente (Cogamads) sobre el impacto que tendrá el proyecto de la fábrica de fibras textiles que plantea Altri en el concello lucense de Palas de Rei.
Así lo han reclamado en la sesión de Cogamads de este viernes, en la que se ha incluido en el orden del día la petición de ambas organizaciones. A la cita se han vuelto a ausentar entidades ecologistas (Adega, Federación Ecoloxista Galega y la Sociedade Galega de Historia Natural) por llevar dos años sin tratar la Xunta los efectos ambientales de numerosos proyectos eólicos.
Desde el Sindicato Labrego denuncian que la “macrocelulosa” provocará “contaminación, alteración de los ecosistemas, forestación, lluvia ácida y acaparamiento de tierras» que «amenazan la producción alimentaria».
«Patente preocupación social»
Según su vocal, Diego Sánchez Agra, la manifestación del pasado domingo con 20.000 personas en contra de la planta supone «una muestra clara» de la «patente preocupación social». Por ello, exige a la Xunta que «cumpla proactivamente con sus responsabilidades como órgano consultivo de la Consellería de Medio Ambiente» y que traslade al Cogamads el informe de las implicaciones de la instalación en recursos hídricos, patrimonio natural y cultural, así como en numerosas granjas del entorno.
El SLG recuerda que en un radio de 30 kilómetros en la comarca de A Ulloa se ubican más de 5.000 granjas y muchas de ellas producen alimentos bajo sistemas de calidad, como el ejemplo de la Denominación de Orixe Protexida (DOP) Queixo Arzúa-Ulloa.
«La Xunta de Galicia no puede seguir haciendo oídos sordos a las evidencias científicas y a la preocupación social que provoca este proyecto. Como secundaron varias de las intervenciones hoy, consideramos que hay que abrir el debate sobre las implicaciones medioambientales y sociales señaladas tanto por nosotros como por otras entidades de este Consello, como la CIG o las universidades de Vigo y de A Coruña», agrega.