Celsa monta un consejo plagado de ex de Gallardo Balboa, candidato con Megasa a socio industrial
Los consejeros independientes de la nueva Celsa, en manos de los fondos, son expertos en procesos concursales y de reestructuración que estuvieron presentes en el que llevó a cabo KKR y que derivó en la venta de la siderúrgica extremeña a Cristian Lay, en un proceso en el que también pujó Megasa
El nuevo consejo de administración de Celsa cuenta con varios miembros independientes que conocen bien los pormenores de Gallardo Balboa, grupo siderúrgico extremeño que en 2020 pasó a manos de la división industrial de Cristian Lay, un conglomerado en manos del empresario Ricardo Leal. El dato no es baladí. ya que en el sector se da por hecho que este es uno de los candidatos a entrar en el accionariado de la compañía hasta ahora en manos de la familia Rubiralta. En las quinielas también se encuentran la vasca Sidenor y la gallega Megasa.
En el marco de la aplicación del plan de reestructuración de Celsa aprobado por sentencia judicial el pasado septiembre y que arrebató la propiedad a la familia Rubiralta para dejarla en manos de los fondos acreedores, este lunes, la compañía siderúrgica anunció el desembarco como consejero delegado de Jordi Cazorla, un nombramiento que ya había sido avanzado el pasado 24 de noviembre.
Consejo de transición
Cazorla, ingeniero industrial y, hasta ahora, director general para el sur de Europa del gigante del embalaje DS Smith, acompañará de este modo en la cúpula de la siderúrgica a Rafael Villaseca, ex CEO de Naturgy y nuevo presidente no ejecutivo. La compañía ya pilotada por los fondos destaca que, “en paralelo, se está avanzando en la composición del nuevo consejo de administración de la sociedad, que se espera esté constituido a lo largo de las próximas semanas”. Así, el abogado de Estado Daniel Alaminos ocupará un asiento como secretario del Consejo de Administración mientras que, de manera provisional, ocupan el puesto de independientes María Esther Alfonso, Antonio Arenas, Francisco Javier Díaz-Galvez y Luis Aurelio Martín Bernardo. Dicen desde Celsa que “todos ellos cuentan con una amplia experiencia en la gestión de empresa en procesos de transición y en la implementación de planes de viabilidad”.
Si bien su nombramiento es provisional, los cuatro consejeros independientes designados para el órgano de administración de Celsa son expertos en procesos concursales. Esther Alfonso es socia de la auditora Audiex, mientras que Antonio Arenas es administrador concursal y Díaz-Galvez y Luis Martín Bernardo son socios de la compañía Abencys Reestructuraciones. La misma anunció que ambos habían sido designados como consejeros transitorios de Celsa una vez homologado su plan de reestructuración por el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Barcelona.
Paralelismos con Gallardo Balboa
En 2019, Luis Martín Bernardo accedió al consejo de administración de Gallardo Balboa hoy en manos de Cristian Lay. Lo hizo cuando el fondo americano KKR se quedó con la compañía, hasta entonces en manos del jerezado Alfonso Gallardo García. En un proceso que guarda similitudes con el de Celsa, el fondo americano auxilió a la compañía en 2014, ayudándola a refinanciar parte de la cuantiosa deuda que mantenía con la banca. Posteriormente y al incumplirse los compromisos de pago, acabó por hacerse con el activo.
Ese 2019 otro actual consejero de Celsa, Antonio Arenas, también desembarcó en el consejo de Gallardo Balboa en calidad de vicepresidente, puesto que mantuvo hasta 2020.
Según datos del Registro Mercantil, además de Martín Bernardo y de Arenas, Esther Alfonso y Díaz-Gálvez también pasaron por Gallardo Balboa como apoderados mancomunados. Todos fueron revocados de sus puestos en 2020, año en el que KKR vendió la compañía a Cristian Lay. Las crónicas de la época apuntaban a que la adquisición, enmarcada en una suerte del operación de salvamento del grupo industrial extremeño, incluía una reestructuración de la deuda de la siderúrgica para reducirla en 440 millones, además de la asunción de otros pasivos e instrumentos que totalizaban unos 145 millones de euros.
Cristian Lay, domiciliada como Gallardo Balboa en Jerez de los Caballeros, se impuso en el proceso de venta a Megasa, el gigante de la familia Freire Arteta con base de operaciones en Narón, que también pujó por el activo siderúrgico.
Socio industrial
El conocimiento de Cristian Lay por parte de los consejeros de Celsa no es una cuestión menor en estos momentos, en los que los fondos están obligados a dar entrada a un nuevo socio industrial. Como ya antes se indicó, el pasado año, los fondos acreedores tomaron el control de Celsa al capitalizar la deuda. Los mismos asumieron una serie de compromisos con el Gobierno, que puso condiciones para dar luz verde a la toma de control de la compañía. Además del mantenimiento del empleo, está previsto que antes del 30 de mayo, den entrada a un socio industrial español en el capital de la compañía, con una participación de un 20%.
Aunque no existen manifestaciones públicas sobre el tema y las empresas guardan silencio, en el sector se da por hecho que el nuevo socio estará entre la terna conformada por Sidenor, Megasa o Cristian Lay. Fuentes empresariales indican a este medio que si bien por sus números es normal que se baraje la posibilidad de los Freire Arteta, su hipotético desembarco iría en contra de su forma habitual de trabajar, alejado de socios.