Audasa refinancia (otra vez) su montaña de deuda en pleno debate sobre el futuro de la AP-9
La concesionaria de la autopista del Atlántico explica que este año tenía que afrontar dos vencimientos por valor de más de 180 millones de euros
Audasa, la concesionaria de la AP-9, volvió a refinanciar a principios de este año parte de su millonaria deuda. Lo hace justo cuando en Galicia, de nuevo, el debate sobre el peaje de la Autopista del Atlántico vuelve a elevarse después de que la Comisión Europea haya anunciado la apertura de sendos expedientes de infracción a España por incumplimiento, por un lado, de la legislación comunitaria sobre contratación pública y, por otro, de la normativa sobre la concesión de autopistas, un hecho, que, al hilo, ha motivado que enviase una segunda carta de emplazamiento al Gobierno sobre la denuncia realizada por En Colectivo por la autopista gallega.
Pasos, según el movimiento En Colectivo y el propio alcalde de Vigo, Abel Caballero, que podrían acabar derivando en el fin de los peajes en el vial que vertebra la Galicia atlántica.
Fondo de maniobra negativo
Y pese a esa posibilidad, Audasa sigue llevando a cabo operaciones de refinanciación de deuda. Queda evidenciado en las cuentas de su sociedad dominante Itínere, que en su memoria correspondiente a 2023 indica que cerró ejercicio con un fondo de maniobra negativo de 84,4 millones de euros precisamente como consecuencia “del vencimiento en noviembre de 2024 de dos operaciones de financiación de Audasa”.
Se trata, en concreto, de una emisión de obligaciones de 100 millones realizada en noviembre de 2020 y un préstamo bancario de 84,9 millones también desembolsado el ejercicio de la pandemia.
Refinanciación
Hace unos meses, en enero de 2024, Audasa logró cubrir un nuevo préstamo con inversores institucionales de 84,5 millones, a tipo de interés fijo y con vencimiento en 2034. El destino de este crédito fue la cancelación anticipada y total del préstamo bancario que vencía a finales de este año y que atenazaba a Itínere.
Por otro lado, los administradores de la compañía también indican que prevén que a fecha de su vencimiento, la emisión de obligaciones de 100 millones de euros también sea refinanciada mediante “una nueva facilidad crediticia por el mismo importe”. No obstante, aseguran que “Audasa dispondrá de capacidad financiera suficiente, en dicha fecha, para atender la amortización”.
En sus últimas cuentas publicadas y con respecto al cerco de Bruselas, que podría derivar en una modificación por parte del Gobierno de sus acuerdos concesionales, Audasa recuerda “el derecho de la sociedad a ser debidamente indemnizada”.