Amancio Ortega y Bernard Arnault, los dos únicos magnates de la moda entre las treinta primeras fortunas del mundo
El fundador de Inditex ocupa el puesto número 13 de millonarios mundiales de 'Forbes' con un patrimonio estimado de más de 105.000 millones de euros, la valoración más alta que ha alcanzado en su carrera
Al igual que Inditex en bolsa, la valoración de la fortuna de Amancio Ortega toca máximos. Según el índice de Forbes actualizado a tiempo real, el dueño de Zara ocupa el puesto número 12 de los millonarios mundiales con un patrimonio estimado en 113.800 millones de dólares, algo más de 106.000 millones de euros al cambio. Hace casi una década que llegó a ser el hombre más rico del mundo. Entonces, se le presuponían unos 30.000 millones menos.
La escalada de Ortega Gaona en cuanto al volumen de su fortuna tiene aún más enjundia por el sector al que pertenece. Y es de las 30 primeras fortunas mundiales, tan solo él y Bernard Arnault, presidente y director ejecutivo del imperio LVMH, se dedican a la moda. De hecho, la mayoría de los grandes magnates mundiales pertenecen al sector de la tecnología o las inversiones.
Millonarios tecnológicos
El hombre más rico del mundo en estos momentos es el controvertido Elon Musk, dueño de Tesla y la empresa aeroespacial Space X, además de la antigua Twitter. Empresario estadounidense de 52 años, amasa una fortuna de 213.000 millones de dólares. Le sigue Jeff Bezos, con su corporación Amazon y una fortuna de algo más de 204.000 millones de dólares.
El francés Bernard Arnault ocupa la tercera posición, con un patrimonio de unos 182.000 millones de euros. Con 75 años de edad, es consejero delegado del imperio LVMH, dedicado a la moda, pero fundamentalmente a todo lo que rodea el lujo. El suyo es un gigantesco conglomerado del que cuelgan más de 75 marcas y que está valorado en 400.000 millones con enseñas como Louis Vuitton, Moët, Dior, Loewe, Bulgari o Givenchy. Con su holding Agache controla el 47% de las acciones de la compañía y el 63% de los derechos de voto.
La compañía que preside cerró el ejercicio 2023 con una facturación estratosférica de 86.153 millones de euros, un 8,8% más, aunque ralentizando su crecimiento de forma notable, ya que en 2022 avanzó un 23% en ventas. El beneficio neto del conglomerado alcanzó los 15.174 millones de euros, una cantidad por debajo de sus previsiones debido, indicó el grupo, a los efectos negativos de las divisas, que redujeron sus márgenes.
Después del francés hay que bajar en el ránking hasta el puesto número 13, el que ocupa Amancio Ortega para encontrar a otro empresario relacionado con el mundo del textil. Antes que él se sitúan Mark Zuckerberg (Facebook), Larry Ellison (Oracle), Larry Page (Google), Sergey Brin (Google), Warren Buffet (con su sociedad de inversión Berkshire Hathaway), Bill Gates (Microsoft), Steve Ballmer (Microsoft), y Mukesh Ambani (Reliance Industries).
Tras Amancio Ortega, millonario número 12 en la actualidad del mundo, la lista sigue liderada por empresarios relacionados con el sector tecnológico o de las telecomunicaciones, con la excepción de la dueña del imperio L´Oreal, Francoise Bettencourt, que ocupa el número 16 de las fortunas mundiales, y Jim, Rob y Alice Walton, de la dinastía americana dueña de la mayor cadena minorista del mundo, los grandes almacenes Walmart, en los peldaños 18, 20 y 21.
Los competidores, a distancia
A partir de ahí hay que bajar hasta el puesto número 34 para encontrar a un millonario relacionado con el sector textil. En este caso se trata de Phil Knight, el fundador de la enseña deportiva Nike, con una fortuna que se aproxima a los 40.000 millones de dólares. En el puesto número 43 se encuentra Tadashi Yanai, el dueño de Fast Retailing, la compañía detrás de Uniqlo, el Zara japonés.
A una distancia todavía mayor está Stefan Persson, de H&M, con un patrimonio de algo más de 19.000 millones de euros.
Inditex, hacia los 6.000 millones
¿Sobre qué se sostiene y por qué crece de esta manera la fortuna de Amancio Ortega? El grueso de su patrimonio le viene dado por la participación de casi un 60% de las acciones de Inditex que, en estos momentos, roza máximos históricos en bolsa, con una capitalización bursátil que sobrepasa los 146.000 millones de euros. Con la acción por encima de los 47 euros, los analistas ven todavía potencial de crecimiento a la multinacional de Arteixo y sitúan el precio objetivo por encima de los 50 euros. Esta misma semana, Bernstein marcó en esa cifra el valor objetivo de la acción, que llega hasta los 53 euros para HSBC o los 52 para Goldman Sachs.
El avance de Inditex en bolsa (la acción se ha revalorizado en más de un 18% en lo que va de año) deriva de los buenos resultados del grupo textil. El año pasado marcó su propio techo, con unas ventas que rozaron los 36.000 millones de euros y un resultado neto de 5.381 millones de euros. El consenso de mercado dice que cuando finalice el ejercicio en curso, en febrero del próximo año, se acercará a los 6.000 millones de euros de ganancia, con una cifra de negocio que se estirará hasta sobre los 38.800 millones.
Dividendos y ladrillo
Mejores resultados de Inditex se traducen en más dividendos para el accionista y, por tanto, para Ortega Gaona. Este año, su posición en el grupo le reportará unos pagos de 2.846 millones en ingresos. Estas cantidades van a parar a su holding Pontegadea, que los reinvierte en posiciones en el sector energético (Red Eléctrica, Enagás, Telxius y parques eólicos) además de, fundamentalmente, en el ladrillo.
A finales de 2022 la cartera inmobiliaria de Amancio Ortega estaba valorada en 18.156 millones de euros, una cantidad que en la actualidad será considerablemente mayor teniendo en cuenta las adquisiciones del último año, en el que ha comprado centros logísticos (como el de Wallmart en California o el de DSV en Países Bajos) y edificios residenciales (como el rascacielos de West Madison Street en Chicago). Todas sus compras vienen con inquilinos incorporados, que le reportan rentas desde el primer día. En 2022, último año del que hay datos oficiales, se anotó unos ingresos por alquileres de 782 millones de euros.