Teléfonica con Telxius, Enagás, REE… Amancio Ortega, socio del Estado en tres grandes del Ibex

La entrada de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) en Telefónica hace que, de forma indirecta, el Estado vuelva a coincidir como socio de Amancio Ortega, fundador de Inditex y primera fortuna de España, a través de una grande del Ibex. Y ya van tres, una situación atípica dentro del empresariado español.

La pasada semana, el Gobierno aprobó en Consejo de Ministros la entrada de la SEPI, dueña de Navantia, en Telefónica, haciéndose con un 10% de su capital, lo que la convertirá en la primera accionista de la operadora. De esta forma, el Estado regresa al capital de la compañía de telecomunicaciones 26 años después de su privatización. Tendrá derecho a sentarse en el consejo de administración de la cotizada y será su primer accionista, por delante de BBVA, Caixabank, Saudi Telecom Company (STC) y el fondo BlackRock.

Con esta operación, además, de forma indirecta, el Estado se convierte en eventual socio de distintas empresas dentro de los negocios en los que participa Telefónica: una de ellas, Pontegadea, holding de Amancio Ortega. De esta forma, el capital estatal desembarca en el mundo de las infraestructuras de telecomunicaciones y, en concreto, los cables submarinos, con Telxius, compañía que está participada en un 70% por Telefónica y en un 30% por el brazo inversor de la familia Ortega.

Redeia

Pero es que el Estado, a través de la SEPI, ya es socio de Amancio Ortega al convivir con Pontegadea en otras dos participadas: Red Eléctrica y Enagás.

El verano de 2021, Pontegadea entró en el accionariado de Redeia, la antigua Red Eléctrica, al hacerse con una participación de un 5%, convirtiéndose en la segunda accionista de referencia de la compañía gestora de la red de distribución de energía eléctrica por detrás, precisamente, de la SEPI, que controla un 20% del capital. Por detrás del vehículo inversor de Ortega se encuentra el fondo BlackRock, con un paquete accionarial equivalente a un 4,59%. En la actualidad, su paquete accionarial vale, según precios del mercado, unos 405 millones de euros, 45 por debajo del precio que presentaban las acciones de REE en el momento de su desembarco.

Enagás

La primera vez que Pontegadea coincidió en el capital de una empresa con el Estado fue dos años antes, en 2019, con el desembarco en Enagás. Los del fundador de Inditex se hicieron con una participación de un 5%, entonces valorada en unos 280 millones de euros. El holding inversor, que se nutre de los dividendos que anualmente le aporta la multinacional textil, emergió en el capital de la cotizada a través de una ampliación de capital de 500 millones de euros, que se realizó para financiar parte de la compra de una participación adicional en la americana Tallgrass.

La operación convirtió a Pontegadea en el primer accionista privado de la compañía socia de Reganosa por detrás de la SEPI, que se vio forzada a acudir a la ampliación para no diluir su participación, también de un 5%. Por detrás de la sociedad de inversiones industriales del Estado y del holding de Ortega se encuentra, también aquí, BlackRock, con un 3,9%, Tras él, con un 3,6%, según los últimos datos de la CNMV, Bank of America y, con un 3,103% el fondo del Emirato de Abu Dabi, Mubadala.

La actual capitalización bursátil de Enagás valora la participación de Pontegadea, identica a la de la SEPI, en unos 204 millones de euros.

Consejos de administración

Al margen de la coincidencia entre Estado y Pontegadea a través de grandes del Ibex, los de Amancio Ortega no semejan socios especialmente complicados. Y es que a pesar de su posición, la compañía de Roberto Cibeira no se sienta en el consejo de administración ni de Enagás ni de Red Eléctrica.

No ocurre lo mismo en Telxius. Este año, tanto Telefónica como Pontegadea optaron por reestructurar el consejo de administración de la cablera tras la compra de la participación del 40% en manos de KKR. Esta maniobra no solo cambió la configuración de la compañía, quedando el 70% en manos de los de Pallete y el 30% en la family office coruñesa. Además, se incorporaron al consejo de administración María García-Legaz, directora de la Oficina del Presidente e integrante del comité ejecutivo de la teleco; y Roberto Cibeira, CEO de Pontegadea

La lusa REN

Los de Amancio Ortega iniciaron hace unos años una apuesta, al margen de la inmobiliaria, por inversiones en compañías energéticas con posiciones casi monopolíticas y presencia del Estado en su accionariado. A la vez que se fraguó su entrada en Red Eléctrica, el fundador de Inditex entró también su equivalente luso, Redes Energéticas Nacionais (REN) al hacerse con una participación de un 12% que adquirió a Mazoon, sociedad dependiente de Omán Oil.

Curiosamente, Pontegadea vuelve a coincidir, de forma indirecta, con el Estado español en Portugal y es que, desde 2007, REE posee una participación de un 5% en REN, que adquirió a EDP.

De esta forma, con la operación de Telefónica, Pontegadea emerge como la compañía privada estatal, entidades bancarias a un lado, con mayores coincidencias inversoras con el Estado a través de la SEPI.