Amancio Ortega trabaja con tres auditoras tras el traspiés de EY, la vuelta de Deloitte y la reelección de KPMG
El grupo Pontegadea vuelve a escoger a KPMG para chequear las cuentas de Partler mientras que repesca a Deloitte para su holding de activos en suelo británico Pontegadea GB 2020 tras la ruptura en Reino Unido con EY
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El fundador de Inditex, Amancio Ortega, durante el concurso de saltos internacional de A Coruña, enmarcado de manera excepcional en el Longines Global Champions Tour, campeonato referente del panorama hípico que afronta la primera de sus tres jornadas en Casas Novas.- EFE/Cabalar
La family office de Amancio Ortega, Pontegadea, trabaja con tres de las cuatro grandes auditoras mundiales, las big four. En la actualidad, lo hace con todas menos con PwC después del traspiés sufrido con EY en Reino Unido que obligó a los de Roberto Cibeira a volver a solicitar los servicios de Deloitte. Además, el grupo coruñés acaba de renovar la contratación de KPMG para chequear las cuentas de Partler Participaciones, sociedad con la que controla el 9,28% del capital de Inditex.
Para entender el reparto de auditoras actual que existe en el grupo Pontegadea hay que tener en cuenta su última reorganización societaria, que se llevó a cabo durante la pandemia. Entonces, el grupo familiar quedó dividido en tres grandes holdings. Uno, Pontegadea Inversiones, que retiene el 50% del capital de Inditex. Otro, Partler Participaciones, que, como se mencionó, aglutina el 9% de la textil y del que, además, cuelga la participación de un 5% en Enagás. La tercera pata del grupo es Pontegadea GB 2020, sociedad que se creó para aislar los activos británicos del resto ante hipotéticos impactos del brexit y cuyo principal activo es la sociedad Pontegadea UK, con sede en Reino Unido.
KPMG
Partler Participaciones y, antes que ella, la sociedad Partler 2006, se han mantenido siempre por KPMG. El Registro Mercantil de este viernes evidencia, además, que ambas sociedades acaban de reelegir como auditora a la compañía.
En el pasado, la presencia de esta auditora en el universo Ortega fue mucho mayor ya que, según los registros de la CNMV consultados por Economía Digital Galicia, también fue la encargada de auditar las cuentas de la propia Inditex durante casi una década, entre los años 2003 y 2012. Antes de ella, los análisis de las cuentas de la textil estaban en manos de Arthur Andersen, grupo por el que pasaron muchos cargos de confianza presentes y pasados de los Ortega, de Borja de la Cierva a Carlos Crespo o Roberto Cibeira, actual CEO de Pontegadea.
Según los datos del supervisor bursátil, Arthur Andersen auditó las cuentas de Inditex al menos desde 2000 a 2003, cuando comenzó el trabajo de KPMG. Es cierto que la auditora se vio envuelta por aquella época en el falseo de cuentas de Enron, en 2002, lo que la apeó del podium de las big four.
Deloitte
Acabado el tiempo reglamentario para las cotizadas, el ejercicio 2012 de Inditex fue ya auditado por Deloitte, que continuaría chequeando cuentas tanto de Inditex como en distintas sociedades de Pontegadea hasta 2022. Ese año, los de Marta Ortega y Óscar Garcías Maceiras llevaron a la junta de accionistas el nombramiento de EY como auditor de sus cuentas para los ejercicios sociales 2022, 2023 y 2024, teniendo en cuenta, además, que Deloitte ya había superado el plazo legal establecido, que se extiende hasta los nueve años.
Aunque, en realidad, no habría ninguna relación establecida, ya que se trata de sociedades distintas, el cambio de auditora también se reprodujo en las grandes filiales de Pontegadea. Así, el 22 de diciembre de 2022, el Registro Mercantil recogía la entrada de EY como auditora en Pontegadea Inversiones, así como otras sociedades dependientes, como Pontegadea Inmobiliaria o Pontegadea España.
El cambio tardó más en producirse en Pontegadea GB 2020, la sociedad que aglutina los activos inmobiliarios del veterano empresario en suelo británico, debido a que la compañía se constituyó el ejercicio 2020.
Pontegadea GB 2020 arrancó su andadura con Deloitte como auditora y no sería hasta enero de 2023 cuando se produjo el cambio a EY, según la documentación consultada por Economía Digital Galicia. No obstante, los problemas comenzaron muy pronto.
EY
En octubre de 2024, la filial británica de EY y Pontegadea rompieron su vinculación en Reino Unido. Los de Ernst & Young alegaron discrepancias en los honorarios que reclamaba por su trabajo en la filial Pontegadea UK con relación a las cuentas del ejercicio finalizado en diciembre de 2022. La auditoría, en todo caso, se cerró sin salvedades.
Aunque no hubo ninguna contestación oficial, desde el entorno de Pontegadea se deslizó siempre que el problema había venido por la demora de la auditora. El grupo acostumbra a tener las cuentas de todas sus filiales listas sobre el mes de abril para poder presentar sus estados consolidados en julio. Sin embargo, en el caso británico los retrasos se encadenaron, a pesar de no advertir finalmente salvedades los auditores. Por poner un ejemplo, en febrero de 2024, catorce meses después del cierre del ejercicio 2022, Pontegadea UK presentó sus cuentas.
Sea como fuere, los contratiempos en Reino Unido determinaron la ruptura de relaciones entre EY y Pontegadea en distintas sociedades, que volvieron a ser auditadas por Deloitte. Es el caso de la mencionada Pontegadea UK, la inmobiliaria británica Almack Ltd, que depende de Partler, o Hills Place, sociedad domiciliada en Luxemburgo, pero cuyo negocio inmobiliario está en Reino Unido. Por último, uy tal y como se recoge en el Registro Mercantil de este viernes, Deloitte volvió a ser nombrada como auditora de la española Pontegadea GB 2020.
Pero la ruptura con EY no fue total, ya que la firma inglesa continúa en la actualidad auditando Pontegadea Inversiones, la gran sociedad del grupo patrimonial de Amancio Ortega, así como sus filiales dependientes.
Resta la incógnita de si expirado el periodo inicial correspondiente a los ejercicios 2022, 2023 y 2024, Inditex vuelve a renovar vía junta de accionistas los servicios de EY como auditora, un proceso, no obstante, independiente de la situación de su accionista Pontegadea.