Amancio Ortega recibirá este año en dividendos de Inditex más de lo que valen cuatro empresas del IBEX

Inditex repartirá este año casi 4.800 millones en dividendos, la mayor retribución que ha entregado la multinacional en su historia al aplicar un incremento del 28% respecto al año pasado. El alza del dividendo llegó después de un ejercicio récord del gigante textil, ya no solo a nivel de resultados, con 5.381 millones de beneficio (30,3% más) y casi 36.000 millones en ventas (10,4% más y un 14,1% más a tipo constante), sino también en la capitalización en bolsa.

El valor del grupo que preside Marta Ortega llegó a superar los 145.000 millones el pasado abril, dejando muy atrás la atonía de años anteriores, cuando los analistas ponían en duda la capacidad de crecimiento de la multinacional y de sus márgenes. Entre 2020 y 2022, con el Covid de por medio, la capitalización retrocedió un 4,6%. Desde 2022 hasta hoy, prácticamente se duplicó.

El dividendo de Amancio Ortega

El incremento de las ganancias permitió también al consejo de administración elevar los dividendos, política siempre bien recibida por los inversores. El principal beneficiado es el primer accionista del grupo, Amancio Ortega, fundador y propietario del 59,3% de las acciones. Este año, el hombre más acaudalado de España recibirá por la retribución de su compañía 2.846 millones. Si fuese una cuestión de puras matemáticas, el mareante dividendo le bastaría al empresario gallego para comprar cuatro empresas del IBEX.

Esos 2.846 millones superan el valor en bolsa de cuatro compañías del selectivo español. Es el caso de Sacyr, cuya capitalización se sitúa actualmente en los 2.638 millones; de Acerinox, que transita por los 2.673 millones; de Meliá, con 1.719 millones de capitalización; y de Solaria, con 1.442 millones.

Siguiendo la misma fórmula, también podría comprarse todas las cotizadas gallegas -San José, Adolfo Domínguez, Altia, EiDF…–, cuyo valor conjunto en el parqué no alcanza los 2.000 millones aún sumando a Pharma Mar (700 millones de capitalización), cuyo vínculo con su lugar de origen es más histórico que presente, pues traspasó todos sus negocios en Galicia.

La liquidez de Pontegadea

Amancio Ortega ingresa el dividendo de Inditex a través de Pontegadea, la sociedad con la que luego invierte para engordar una cartera inmobiliaria valorada en 18.156 millones, pero también con la que sufraga la obra social de su fundación (casi 500 millones de inversión comprometidos entre 2023 y 2027) y con la que toma participaciones en empresas vinculadas, principalmente, a la energía, como Enagás, Redeia, Ren o los proyectos renovables de Repsol.

En este aspecto, el dividendo de Inditex no mide solamente el fútil incremento de una fortuna ya gigantesca, sino también la capacidad de Ortega para invertir en momentos de zozobra de la financiación gracias a las inyecciones de liquidez que recibe de la multinacional con base en Arteixo. Algo así sucedió en la última etapa, cuando el empresario diversificó su cartera sobre todo hacia los activos logísticos, aunque también al residencial y hacia los proyectos renovables.

La fortuna de Ortega

Forbes estima el patrimonio del empresario en 112.000 millones de dólares, situándolo como la duodécima fortuna del mundo. El dinero de Ortega está ligado a la evolución de Inditex en bolsa, de manera que cuánto mejor le va a la multinacional en el parqué, más incrementa el valor de la participación de su principal accionista y más sube en la lista de los más ricos.

En la crisis del Covid, con buena parte de las tiendas de Zara cerradas por la pandemia, la publicación estimaba la fortuna del fundador de Inditex en 55.100 millones de dólares. En los cuatro años siguientes, Ortega ha duplicado aquella estimación, convirtiéndose en el primer español que supera los 100.000 millones de patrimonio. Con ese dinero se puede comprar cualquier empresa del IBEX salvo una: Inditex. La siguiente por capitalización es Iberdrola, pero su valor en bolsa solamente alcanza los 78.000 millones.