Extrugasa, el aluminio gallego que aguanta el tipo: sus dos grandes sociedades ganan más pese a reducir ventas

Mientras que Alcoa busca un comprador para la planta de San Cibrao en A Mariña, Galicia cuenta con otras empresas del sector del aluminio con suerte bien distinta. Es el caso de Extrugasa, dirigida por Francisco Quintá y con base de operaciones en Valga (Pontevedra). Dedicada a la extrusión de perfil de aluminio y al desarrollo de soluciones para construcción e industria, las principales sociedades de la compañía aumentaron sus beneficios el pasado año a pesar del retroceso de los ingresos debido a la caída de los precios en el sector.

Así se refleja en las cuentas depositadas en el Registro Mercantil por las sociedades Extrusionados Galicia y Extrugasa Transformación, consultadas por Economía Digital Galicia a través de la solución analítica avanzada Insight View. Con una plantilla media de más de 300 personas, la primera cerró el pasado ejercicio con unos activos de 122 millones de euros y un patrimonio neto que se estiró de los 70 a los más de 80 millones de euros.

La cifra de negocios de la compañía retrocedió en 2023 casi un 30%, de los 184,5 a los 130,7 millones de euros. No obstante, el resultado de explotación de la firma mejoró levemente hasta los 12,6 millones mientras que su beneficio neto mejoró el pasado de los 9,5 a los 9,8 millones de euros.

Ahorro de 53 millones

Los administradores de la compañía indican en el informe de gestión que acompaña su balance que el “decrecimiento considerable de la cifra de negocios” no se ha traducido en una bajada en el resultado del ejercicio, que aumenta. Explican que “el crecimiento se fundamente en la bajada de los costes, destacando la disminución de los aprovisionamientos, con una bajada de un 33,4% con respecto al año pasado, así como una reducción de otros gastos de explotación de un 34,59%”. De hecho, los ajustes en el gasto han supuesto a la sociedad un ahorro de 53 millones de euros.

Extrugasa, con una plantilla que se ha mantenido constante durante el pasado año, incrementó también la disponibilidad de liquidez, que pasó de los 33 a los 43 millones de euros. “La empresa presenta un fondo de maniobra de 68,3 millones, incrementándose respecto a la anterior cifra de 63,2 millones, gozando de buena salud financiera para hacer frente a los pagos a corto plazo”, expone.

De los casi 131 millones contabilizados el pasado ejercicio en ventas, el 51%, cerca de 67 millones se produjeron en el Estado español mientras que el 41%, otros 54 millones, se quedaron en territorio comunitario y 9,3 millones, el 7%, a la exportación internacional.

Respaldo del grupo

Otra de las sociedades del negocio español del grupo es Extrugasa Transformación, cuya sede se encuentra también en la parroquia de Campaña, en Valga. Con métricas más discretas, en este caso, también se detecta una reducción de la cifra de negocio de 10,7 a 9,1 millones de euros, un 14,4% menos. La empresa ha seguido, no obstante, el mismo método que en Extrusionados Galicia para mejorar el beneficio de la sociedad, que pasó de los 107.000 a los 148.000 euros. De nuevo, se optó por una reducción de costes, que evitó un impacto en el resultado de la compañía.

Esta sociedad, no obstante, presenta más tensiones que la otra, con un fondo de maniobra negativo de 7,3 millones de euros, lo que imposibilita, por si sola, atender a los pagos a corto plazo. No obstante, indican que “la empresa tiene el apoyo del grupo fiscal para hacer frente a estas circunstancias”.

Este 2024, Extrugasa ha continuado adelante con su plan para la contención de costes, poniendo en marcha una planta fotovoltaica, obra de Norvento Enerxía, para asegurar el autoconsumo eléctrico en las instalaciones de Valga. Esta instalación permite cubrir hasta el 25% de su demanda energética a través de fuentes renovables.