Altri gana 21 millones en tres meses y se ve fuerte para invertir: “Tenemos solidez financiera para los proyectos”

Un día después de que Greenpeace colgara una pancarta en la Catedral de Santiago contra la fábrica de fibras textiles de Altri en Palas de Rei, la pastera lusa ha presentado sus resultados trimestrales plena de optimismo. Al menos, en cuanto a la marcha de sus finanzas y a la fortaleza que le otorgan para desarrollar los proyectos que tiene en el punto de mira.

La compañía que dirige José Soares de Pina ha cerrado el primer trimestre de su ejercicio con 222,7 millones en ingresos, lo que supone un ligero incremento del 0,9% respecto al mismo periodo del año anterior. No radica ahí la razón del optimismo, sino en el avance del 18,9% respecto al trimestre anterior, lo que da una idea de la mejora del contexto de mercado, sobre todo en cuanto al precio de la celulosa. El aumento de la demanda asiática está siendo una de las claves, aunque el comportamiento mejora también en Europa y América del Norte.

Mejora de la rentabilidad

Altri cierra marzo con un ebitda de 50 millones, prácticamente el mismo que en el mismo periodo de 2023, mientras que el margen de ebitda se ensancha ligeramente hasta el 22,5%, desde el 22,3% del ejercicio anterior. Una vez más, la rentabilidad luce más enfrentada a los datos del cierre del año pasado, pues el ebitda crece un 25,7% respecto al cuarto trimestre en un mercado cíclico como el de la pasta de papel.

Los beneficios ascendieron a 21,6 millones hasta marzo, casi un 10% más. Los números respaldan el incremento del dividendo aprobado en la .junta de accionistas del pasado 3 de mayo, que permitirá repartir un payout del 120% respecto a las ganancias de 2023.

La confianza de Altri

El consejero delegado de la pastera ve en el arranque del año una recuperación notable del mercado sostenida por Asia y Norteamérica. «Altri aumentó el nivel de producción en sus tres unidades en Portugal, incluso teniendo en cuenta la parada programada de Caima. Las ventas de fibras celulósicas salieron reforzadas, con cerca del 90% destinadas a mercados internacionales, siendo así posible sacar provecho del aumento de precios registrado desde el verano pasado», señala.

José Soares asegura en el mensaje que acompaña al informe de resultados que «la dinámica positiva» que perciben en el mercado anticipa una mayor rentabilidad en el segundo trimestre. Esta perspectiva, dice, les permite tener la solidez financiera para «continuar con las inversiones para seguir creciendo de manera sostenible». «Y también nos permite mantener el foco en el desarrollo de varios proyectos en curso, incluyendo el proyecto Gama en Galicia», concluye en referencia a la planta de fibras textiles de Palas de Rei.

La incertidumbre de Palas de Rei

La factoría requiere de una inversión próxima a los 1.000 millones y está pendiente tanto de la aprobación ambiental por parte de la Xunta como de los fondos europeos. El propio CEO de Altri sostuvo en sus visitas a la comunidad que necesitarían en torno a 250 millones de euros en ayudas para reducir los riesgos de una inversión tan elevada.

El proyecto, en todo caso, ha generado una enorme contestación social por el temor a su impacto ambiental, a pesar de que la compañía lo ha prometido construir un referente en sostenibilidad a nivel europeo. Sin embargo, el plan para la fábrica ha recibido 23.000 alegaciones y este mismo jueves Greenpeace sorprendía al colgar una gran pancarta en la fachada de la Catedral de Santiago contra la planta. La entidad es uno de los múltiples grupos ecologistas que se oponen al proyecto de Altri en Galicia.