Alcoa juega en casa y emerge como ganadora de los aranceles de Trump al aluminio y acero
La dueña del complejo de San Cibrao es vista por el mercado como una de las empresas favorecidas por la decisión del Gobierno estadounidense de gravar importaciones y rebota un 3% en bolsa mientras negocia en España mayores ayudas públicas
![Instalaciones de Alcoa en San Cibrao](https://www.economiadigital.es/galicia/wp-content/uploads/sites/3/2024/03/fotonoticia_20240319121228_1920-1000x665.jpg)
Alcoa vuelve a abrir la puerta a la venta de su negocio en España. Foto: Europa Press
Alcoa es vista por el mercado como una de las ganadoras, al menos de momento, de la guerra arancelaria puesta en marcha por Donal Trump, que este domingo anunció aranceles al acero y al aluminio que entre en Estados Unidos de un 25%. La multinacional dueña del complejo de San Cibrao, en A Mariña lucense, y base de operaciones en Pittsburgh, cerró este lunes la sesión en el Nasdaq en el que cotiza con un rebote de casi un 3%, aunque el precio de las acciones llegó a estirarse más de un 4% a lo largo de la jornada. En las operaciones previas a la apertura del mercado, sus títulos ya se revalorizaban un 5%.
El mercado entiende que la decisión de Trump favorecerá a los productores estadounidenses de acero y de aluminio, ya que rebajará la rentabilidad de sus oponentes. En el caso del aluminio, la gran competencia de Alcoa siempre ha venido, no de de Europa, sino de China, emergiendo en los últimos tiempos como rivales, también India y Turquía.
Suben los productores americanos
Además de las subidas de Alcoa en la bolsa de Nueva York, este lunes también experimentaron rebotes otros productores americanos como Kaiser Aluminiun, de un 2,43%, y de Century Aluminium, en más de un 10%. En lo que atañe al acero, las cotizadas americanas que se anotaron mayores subidas tras el anuncio de Trump fueron Cleveland Cliff, que estiró su cotización casi un 17%, US Steel Corp, que se anotó una subida de un 3,42%, o la fabricante Nucor (+ 6,35%).
En España existe una calma medida con respecto a la aplicación de las medidas, especialmente en el sector del aluminio, teniendo en cuenta que el material presenta muchos más usos distintos que el acero, por lo que habrá que esperar a ver cómo afecta a su comercialización el gravamen. Este lunes, la Asociación Española del Aluminio y Tratamientos de Superficie (AEA), que representa a más de 650 empresas del sector, hacía un llamamiento a la “calma”, toda vez que recordaba que España exporta alrededor de 20.000 toneladas de aluminio al año al mercado norteamericano, unos 130 millones de euros anuales, una cantidad modesta, no siendo este su principal mercado.
Fuentes del sector consultadas por Economía Digital Galicia indican que, pese a la amenaza, Estados Unidos no tiene en la actualidad capacidad para poder gestionar toda su demanda industrial sin proveedores foráneos. Así, indican que se ha dado el caso de empresas españolas que han abierto filiales en el país americano y que han experimentado dificultades para abastecerse allí.
A la espera de ayudas públicas en España
Como corporación, Alcoa se encuentra en un momento relativamente tranquilo. La multinacional logró cerrar el cuarto trimestre de su ejercicio fiscal con un beneficio neto de 202 millones de euros, con lo que pudi acabar 2024 con beneficios. En concreto, fueron 60 millones de dólares de ganancias frente a las pérdidas de 651 millones de dólares de 2023. Dos fueron sus grandes operaciones: la adquisición de su socia en el segmento de la alúmina, la australiana Alumina Limited, y la venta de su participación del 25% de Ma´aden a su socia Saudi Arabian Mining Company por 1.100 millones de dólares. Además, los analistas creen que este año podría alcanzar su récord histórico de beneficios, con unas contundentes ganancias de más de 970 millones de dólares.
Pero hay que tener en cuenta que, en este escenario, con el aluminio y el acero en el foco de una posible guerra arancelaria, Alcoa debe despejar el futuro del complejo de aluminio primario y alúmina de San Cibrao. De momento, el Ejecutivo central se ha comprometido a aumentar las ayudas públicas que recibirá la compañía vía compensación de CO2, una de las reclamaciones de la multinacional para continuar en España. Aunque, de momento, no se conoce qué alcance tendrán estas ayudas, hace tan solo unos meses, Bill Oplinguer, el CEO de la compañía, advertía de que pediría “aproximadamente 80 millones de dólares”, algo más de 77 millones de euros al cambio.
La incógnita de Alcoa en Canadá
Como gran productora americana, los inversores ven a Alcoa como una de las potenciales beneficiarias de las políticas proteccionistas de Trump, aunque también es cierto que, a falta de saber cómo implementará el republicano estos nuevos aranceles, su posición de productora global también genera dudas.
Por ejemplo, uno de los grandes focos productores de Alcoa está precisamente en Canadá. El grupo aluminero ya se quejó en 2018, en el primer mandato de Trump, de la subida de los aranceles de los productos de aluminio exportados desde ese país a Estados Unidos. Si ahora, finalmente, el presidente americano vuelve a imponer mayores tasas al territorio vecino, la dueña de San Cibrao podría volver a verse afectada.
En su última conferencia ante analistas, coincidiendo con la presentación de resultados anuales, el primer ejecutivo de Alcoa indicó que los aranceles de Trump podrían modificar los flujos de envío de aluminio a nivel mundial. La multinacional indicó que, por ejemplo, estaría en condiciones de llevar producción a Estados Unidos desde Australia, donde también cuenta con factorías, y no de Canadá. “Estaríamos optimizando nuestro sistema global en función de cualquier nueva estructura arancelaria… hay un potencial para que el metal salga de Australia y vaya a Estados Unidos si hay una dislocación arancelaria masiva”, indicó el ejecutivo a Reuters.
Hay que tener en cuenta que la acción de Alcoa rebotó el pasado día 4 más de un 6%, precisamente la jornada en la que Trump decidió suspender durante un mes sus amenazas de imponer mayores aranceles a México y Canadá después de que ambos países acordasen tomar medidas para reforzar su seguridad fronteriza y contra el narcotráfico.
En cualquier caso, distintas fuentes del sector industrial consultadas por este medio insisten en que, de momento, hay muy pocos datos sobre cómo pondrá en marcha en marcha Trump estos aranceles y si aplicará algún tipo de exención a empresas americanas. La base de operaciones de Alcoa se encuentra en Pensilvania, precisamente uno de los estados tradicionalmente demócratas que, en esta ocasión, fue clave para la victoria de Trump sobre Kamala Harris en las urnas.
¿Y qué pasa con San Cibrao?
Queda por saber si la guerra arancelaria que parece avecinarse –la Comisión Europea ya ha anunciado que reaccionará “para proteger los intereses de las empresas, los trabajadores y los consumidores europeos frente a medidas injustificadas– tiene algún impacto en el futuro de la planta de San Cibrao, la única de aluminio primario que queda en España y que está todavía en proceso de rearranque y con Alcoa negociando con el Estado mayores ayudas públicas.
Cuando la factoría de A Mariña estaba en funcionamiento, sus principales mercados eran el español y el europeo. La memoria anual de Aluminio Español correspondiente a 2021, antes de la parada de las cubas, indica que el 14% de sus ventas procedían del mercado español, frente a un 33% del resto de Europa y un 53% de fuera, frente al 38% del año anterior. Sin embargo, los administradores de la compañía recordaban que las variaciones se debían en gran medida a la salida de Reino Unido de la UE el 1 de enero de 2021.