La tramitación de los parques eólicos para Alcoa eleva la tensión entre la Xunta y el Gobierno
La Xunta urge a que se agilice la tramitación de los parques eólicos asociados a la multinacional que esperan la autorización estatal de construcción después de que el delegado del Gobierno en Galicia haya instado al Ejecutivo autonómico a hacer lo propio con "los proyectos que tengan PPA con la empresa"
La tramitación de los parques eólicos que suministren energía a la planta de Alcoa en San Cibrao ha generado un nuevo punto de fricción entre el Ejecutivo autonómico y el Gobierno central. Desde la Xunta de Galicia han urgido al Gobierno que agilice la tramitación de los parques eólicos asociados a la multinacional, al ser «fundamentales» para la viabilidad de la industria electrointensiva.
En un comunicado, la Xunta ha recordado que la totalidad de dichos parques dependientes de la tramitación del Gobierno central siguen a la espera de su autorización estatal de construcción. Este mismo martes el delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, ha reivindicado el «compromiso» del Ejecutivo que dirige Pedro Sánchez con los trabajadores de Alcoa y con la comarca de A Mariña, al tiempo que ha instado a la Xunta a «acelerar» la tramitación de los parques eólicos que tengan PPA (Power Purchase Agreement, un acuerdo de compraventa de energía limpia a largo plazo) con la empresa.
Precio eléctrico competitivo
Para la Xunta, la solución para Alcoa pasa por contar con un precio eléctrico que le permita competir en igualdad de condiciones con el resto de Europa y por ejecutar inversiones para mejorar procesos productivos.
Por ello, ha reivindicado que la Administración gallega está agilizando toda la tramitación de los parques eólicos de competencia autonómica, al ser «fundamentales» para la viabilidad de la industria. «Una diligencia que choca con la lentitud del Gobierno central para impulsar los parques eólicos dependientes de tramitación estatal», ha reivindicado.
En concreto, de los 30 parques de tramitación autonómica asociados a Alcoa, 27 ya cumplieron con la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) y quedan tres que lo cumplirán en plazo, según la Xunta. Todos los que ya la tienen, fueron autorizados. «Por la contra, los 11 parques cuya tramitación depende del Gobierno del Estado, ninguno de ellos cuenta con la autorización de construcción, a pesar de que cinco ya tienen la DIA favorable desde enero de este año», ha criticado el Ejecutivo gallego.
La Xunta también ha insistido en la importancia de que el Gobierno apruebe un marco de suministro eléctrico «competitivo, estable y predecible», así como una modificación del estatuto de consumidores electrointensivos y el incremento de la dotación presupuestaria máxima permitida por la normativa europea para la compensación de los costes indirectos por dióxido de carbono (CO2) a la esta industria.
Estas reivindicaciones serán de nuevo reclamadas el viernes en la reunión del comité de seguimiento de Alcoa, según ha explicado el Ejecutivo gallego.
La reivindicación del Gobierno
En una visita a la empresa Pescados Rubén, en Foz (Lugo) Pedro Blanco ha reafirmado su compromiso con los trabajadores y la comarca. Ha trasladado su intención de asistir el viernes a la comisión de seguimiento que el Gobierno ha convocado, según sus palabras, para «exigir a la empresa que cumpla con los puntos acordados y con las inversiones previstas».
«El diálogo social, la colaboración institucional y la coordinación son imprescindibles para avanzar en el futuro de Alcoa», ha esgrimido, antes de insistir en que el Ejecutivo estatal ha realizado «numerosas gestiones para salvar los puestos de trabajo y dar continuidad a la empresa».
Blanco ha apuntado que están destinando ayudas históricas a las industrias electrointensivas e impulsando soluciones en el precio de la energía, 800 millones en los últimos diez años, más de 55 millones en los últimos dos, y así vamos a seguir», ha garantizado, antes de poner el foco en la Xunta y la tramitación de los eólicos destinados a favorecer el suministro energético de la factoría.
«Si queremos que la empresa siga funcionando a pleno rendimiento, debemos facilitar la mayor capacidad de energía. En el Gobierno de España no nos vamos a quedar con los brazos cruzados y esta mesa de seguimiento lo demuestra», ha subrayado, para concluir reiterando el compromiso del Ejecutivo estatal con la continuidad de la factoría, de las familias ligadas a la misma y de la comarca de A Mariña.