Alcoa aplica en San Cibrao el mayor recorte de producción de sus fábricas en el mundo

Alcoa remonta el vuelo en bolsa pese a sus turbulencias en San Cibrao. Las acciones de la multinacional con sede en Pittsburgh se revalorizan un 25,4% en lo que va de 2024 ante la previsión por parte de las casas de análisis de que la firma volverá a ser rentable a partir del tercer trimestre de este mismo año.

Los títulos de Alcoa se encaraman ahora hasta los 42,65 dólares y los expertos vaticinan que sus números rojos se reducirán hasta un tercio este año, pasando así de los 651 millones de dólares (598 millones de euros) registrados en 2022 a los 188 millones de dólares (173 millones de euros) en este 2024.

Los recortes de Alcoa

Alcoa regresará, de esta manera, a la senda de la rentabilidad después de varios años en los que ha venido aplicando una serie de recortes en su red de fábricas ante la escalada de los precios de la electricidad y de las materias primas. Según los últimos datos que la multinacional ha hecho públicos, correspondientes al cierre del mes de marzo, la firma tenía 1,88 millones de toneladas de capacidad fuera de operación.

Desglose de los recortes de producción de Alcoa en su red de plantas de alúmina y aluminio

Este recorte se centra en sus plantas de alúmina, las más demandantes de energía y que, en el caso de San Cibrao, se nutren principalmente de gas. De los 13,84 millones de toneladas de capacidad que Alcoa despliega a lo largo de sus fábricas de este tipo (la lucense de San Cibrao, las brasileñas de Poços de Caldas y São Luís y las sudafricanas de Kwinana, Pinjarra y Wagerup), un total de 1,45 millones de toneladas permanecen fuera de servicio.

De esta cantidad, 800.000 toneladas se corresponden a la planta de alúmina de San Cibrao. Esta opera a la mitad de su capacidad desde verano de 2022. El recorte en su factoría gallega supera a la suma de los aplicados en Kwinana (438.000 toneladas) y Poços de Caldas (214.000 toneladas).

La situación es prácticamente idéntica a la vista en el sector del aluminio. La multinacional que preside Bill Oplinger tiene 11 factorías con una capacidad instalada de 2,65 millones de toneladas anuales. Sin embargo, la firma tiene 425.000 toneladas fuera de operación, de las cuales la gran mayoría se corresponden a San Cibrao.

Y es que, según revelaba Alcoa en su última presentación de resultados, la planta de aluminio de San Cibrao operaba al cierre de marzo al 6% de su capacidad tras dejar al margen a 214.000 de sus 228.000 de capacidad. Estas 214.000 toneladas de capacidad ociosas superan a la suma de las 84.000 que hacen lo propio en São Luís (Brasil), las 54.000 de Warrick (Estados Unidos), las 42.000 Portland (Australia) y las 31.000 de Lista (Noruega). De esta forma, Alcoa carga sobre sus plantas de San Cibrao el 54% de sus planes de recorte a nivel mundial.

El reinicio en San Cibrao

Esta panorámica que Alcoa realiza a sus instalaciones tenía lugar antes de la nueva ronda del encendido de cubas de electrólisis. Tan solo un mes después (en abril), Alcoa activaría una nueva fase de su reactivación de la planta de San Cibrao tras culminar el rearranque de un total de 32 de las 512 cubas de electrólisis con las que cuenta en estas instalaciones para que les está previsto que en las próximas semanas anuncie el listado de empresas y fondos interesados en su compra.

La compañía aseguraba en su última presentación de resultados que la planta “sigue siendo inviable”, motivo por el cual llegó a solicitar un aplazamiento en el reinicio. Sin embargo, estos planes se toparon con la oposición de los trabajadores, motivo por el cual Alcoa ha seguido adelante con el encendido de cubas pese a alertar de que esto llevaría sus cuentas «al límite».

No en vano, Alcoa aseguraba que contaba con «menos de 100 millones de dólares (unos 91 millones de euros)» en efectivo y líneas de crédito para financiar sus actividades en San Cibrao. Es por ello que la empresa daba voz de alerta ante su previsión de incurrir en pérdidas por valor de 550 millones de euros en estas instalaciones en los próximos tres años, unos argumentos contra los que Comisiones Obreras muestra su disconformidad.

Comisiones Obreras clama contra Alcoa

Su federación de industria ha acusado a la multinacional de «estafa» y de «sabotaje» por, según denuncian, incumplir el plan de viabilidad. «Alcoa no gana dinero porque no quiere», lamenta Comisiones Obreras sobre un escenario marcado por «el precio del aluminio en máximos» y «los precios más bajos de la energía en Europa». «Se estima que podría estar ganando 1.000 euros por tonelada de aluminio, que, teniendo en cuenta la capacidad productiva, nos llevaría a más de 200 millones de euros de ganancia», recalcan desde CCOO, que cifra en «cerca de tres millones de euros» los beneficios desde el rearranque de las 32 primeras cubas el pasado mes de abril.

Según el sindicato, “Alcoa sigue con su hoja de ruta, que no es otra que cerrar la factoría y en ningún caso cedérsela a un competidor, porque sabe que la planta es viable y no se la va a dejar a la competencia”.

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Es por ello que desde CCOO de Industria instan tanto al Gobierno como a la Xunta de Galicia a que intervengan la empresa “tal y como la ciudadanía, el comité, el Congreso a iniciativas de varias proposiciones no de ley les han solicitado en varias ocasiones”. El objetivo es “garantizar de este modo la viabilidad de una empresa estratégica según el propio gobierno”.