Portugal eleva el nivel de alerta por los incendios y promete fondos europeos a los afectados
Controlado el incendio iniciado este martes junto al parque empresarial de Laundos, donde se ubica una fábrica de Frinsa y un centro logístico de Mercadona; más de 62.000 hectáreas calcinadas desde el domingo
El Gobierno portugués ha decidido en el Consejo de Ministros celebrado este martes declarar el estado de calamidade en todos los municipios afectados por los incendios que, desde el fin de semana, se extienden por la zona centro y norte del país. Esta declaración permite adoptar medidas excepcionales ante catástrofes con el objetivo de recobrar la normalidad y se suma a la situación de emergencia aprobada el pasado sábado en todo el territorio. Además, el primer ministro, Luis Montenegro, avanzó que se aplicarían también un régimen excepcional a los trabajadores públicos para ampliar su disponibilidad.
Desde el pasado domingo, los incendios han calcinado 62.000 hectáreas, con los distritos de Aveiro y Viseu como los más afectados, pues concentran cerca del 75% de la superficie quemada. Han fallecido siete personas a causa de los fuegos y hay medio centenar de heridos. Tres bomberos perecieron este martes en la localidad de Tábua, en el distrito de Coímbra, cuando el vehículo en el que viajaban quedó atrapado entre las llamas. Montenegro tuvo palabras de pesar hacia ellos y sus familias y advirtió que irá «tras los responsables» que «en nombre de intereses particulares son capaces de vulnerar derechos, libertades, garantías y la propia vida». Desde el fin de semana, los cuerpos de seguridad han detenido a siete personas, según datos de la Guarda Nacional Republicana (GNR).
Según la Autoridade Nacional de Emergência e Protecção Civil, a las 20 horas de la tarde había 64 incendios activos que afectan a 25 municipios. A lo largo de la jornada pasaron por el operativo de extinción más de 6.000 efectivos.
Tranquilidad para Frinsa y Mercadona
El fuego que se inició a primera hora de la tarde en las proximidades del parque empresarial de Laúndos, en Póvoa de Varzim, está ya controlado. En esa zona industrial se ubica la fábrica de A Poveira, la conservera que compró la gallega Frinsa en 2019, y el centro logístico de Mercadona. El humo hizo que la carretera A28 estuviera cortada a lo largo de la tarde en el tramo que une Póvoa de Varzim y Esposende.
El comandante del cuerpo de bomberos de la ciudad informó a última hora del día a Mais Semanario que se había reabierto la circulación. Fuentes de Protección Civil también comentaron a O Minho a lo largo de la tarde que no percibían riesgo de que el fuego alcanzase las instalaciones industriales. Mercadona, por su parte, informó a este medio que está operando con normalidad desde su almacén.
Ayudas a los afectados
Este martes, el ministro de Coesión Territorial, Manuel Castro Almeida, prometió abundancia de recursos públicos para los afectados por el fuego, principalmente enfocados a la recuperación de las casas devoradas por las llamas. Tras una reunión con alcaldes del distrito de Aveiro, el ministro añadió que se podría recurrir a los fondos europeos para hacer frente a los daños causados por los incendios, para lo que puede ser necesario reprogramarlos. Se comprometió a que las ayudas cubran hasta el 85% del coste de reparación.
Respecto a las empresas, señaló que la situación es distinta pues normalmente cuentan con seguros para cubrir este tipo de situación. En todo caso, señaló de nuevo a una posible reprogramación de fondos europeos para aliviar el impacto de la oleada de fuegos.
Luis Montenegro, en su intervención tras el Consejo de Ministros, también admitió que el Gobierno tiene la posibilidad de accionar el Fondo de Solidaridad de la UE.