Europa quiere atar antes del verano su plan de estímulo de 750.000M
La zona euro no quiere repetir los errores de la anterior crisis y tratará de acelerar un pacto rápido, aunque países del Norte de Europa lo rechazan
Ángela Merkel no parece dispuesta a repertir por segunda vez los errores que precipitaron la crisis de la deuda de 2012. Su pacto previo con Francia ha sido muy importante para que la Comisión Europea avanzara hoy un modelo algo más ambicioso, que incluyera además 250.000 millones en créditos, en su fondo de 750.000 millones para la reconstrucción económica tras la pandemia. La institución que preside Ursula von der Leyen divide los fondos por programas, por lo que las líneas se podrían activar dependiendo de las industrias a reactivar. Una parte importante del programa se destinará a financiar políticas de transición ecológica y también se contemplan ayudas para asegurar la solvencia de las empresas.
Italia y España, en principio, serían los países más beneficiados, y estos fondos permitirían adoptar medidas más contundentes de estímulo sin la losa de que el plan tenga que financiarse a costa de engrosar el endeudamiento, que en el caso de ambos países ya subirá con mucha fuerza este año. La propuesta de la Comisión Europea se queda lejos de los 1,5 billones planteados en un principio por el Ejecutivo español, pero la iniciativa pactada por Francia y Alemania ya fue celebrada por Nadia Calviño.
El presidente del Consejo Europeo no quiere dejar pasar tiempo y ya adelantado que espera poder sacar adelante el pacto de forma rápida. En concreto, Charles Michel, pretende que se valore en el Consejo previsto para el 19 de junio, con la intención de que vea la luz antes del «parón» de las vacaciones.
Sin embargo, las negociaciones pueden no ir tan rápidas, porque son varios los países de Europa que lo rechazan y que así lo han manifestado en el Parlamento Europeo después de que Von der Leyen hayan presentado la propuesta. Holanda, Austria, Dinamarca y Suecia ya se posicionaron en contra durante este fin de semana.
Uno de los temas que se debe concretar mejor es qué contrapartidas se le pedirán a los países que reciban estos fondos, o tomen dinero prestado, del futuro fondo de 750.000 millones. Es previsible que, además de la utilización de los fondos para los objetivos que plantea la Comisión, vengan acompañados de requisitos en materia de consolidación y de reformas estructurales. El Banco de España, de hecho, es uno de los que considera que sería lo más razonable, y los planes que presenten deberán ser validados por el Consejo Europeo, a propuesta de la Comisión, donde los países menos proclives al pacto podrían entorpecer las negociaciones.
Un punto de partida para la Comisión para la Reconstrucción
De acuerdo con EFE, Italia ya ha anunciado que comenzará a trabajar en un plan de estímulo y reconstrucción que mejore la productividad. De los planes del Ejecutivo español podríamos tener noticias pronto, ya que estaba prevista una nueva sesión de la Comisión para la Reconstrucción Social y Económica este jueves, en la que se espera la intervención tanto de Pablo Iglesias como de Nadia Calviño.
Ambos vicepresidentes protagonizaron la semana pasada uno de los enfrentamientos verbales tal vez más contundentes de los últimos meses, con la calificación como «absurdo» por parte de Calviño de la reactivación del debate sobre la derogación total y urgente de la reforma laboral.