España mantiene la confianza de Fitch pese a la pandemia
La agencia de calificación Fitch prevé de momento que España resista al choque económico por el coronavirus
Fitch ha mantenido la nota de España con una perspectiva estable de cara al futuro, considerando que es capaz de resistir la debacle económica por el coronavirus. La nota de la agencia de calificación sigue a las de Moody’s y S&P, que dieron también su voto de confianza al país en marzo, en medio del confinamiento y cuando las muertes todavía estaban en ascenso en el país.
No ocurrió de igual forma con Italia, con quien Fitch ha sido pesimista bajando su clasificación hasta BBB-, solo un escalón por encima del bono basura.
La agencia considera que la economía española se encuentra más preparada de lo que estaba para capear la recesión de 2008, con fortaleza en el sector financiero y en la balanza exterior. También apunta a la buena situación de apalancamiento de las empresas y las familias.
Ésta justifica el mantenimiento de la calificación por la solidez de la economía española “que en los últimos años ha reequilibrado su crecimiento y ha logrado un mayor valor añadido”. Por ello, la recuperación del PIB para el siguiente año supondría un aumento del 4,4%. Por otro lado, la previsión sobre la caída del PIB para el 2020 se sitúa en 9,6% en el conjunto de 2020, según la agencia internacional.
A pesar de la recuperación prevista para el año que viene, el país tardará algo más en llegar a los niveles previos a la crisis. Al cierre de 2021, el nivel de renta seguirá siendo un 4,8% inferior al de 2019.
El déficit público aumenta fuertemente por las medidas sanitarias
Las proyecciones pasan también por una escalada de la deuda al 115,9% del PIB este año y al 117,9% en el siguiente, por encima del pico de la deuda pública de la anterior crisis —del 100,7% en 2014—.
La tasa de paro se estima en el 21,5% en 2020, mientras que el déficit público experimentará —según los cálculos de Fitch— un fuerte aumento desde el 2,8% del PIB en 2019 al 11,1% a cierre de 2020, como consecuencia de las medidas del Gobierno para abordar la emergencia sanitaria y apoyar la economía.
El informe destaca que la disminución del déficit público de los últimos años “da cierta confianza en que el endeudamiento reanudará una trayectoria descendente en el medio plazo”, una vez que la crisis provocada por el coronavirus disminuya. La próxima revisión de Fitch llegará en diciembre y las de Moodys y S&P, en septiembre.