La herencia que deja Vodafone a Zegona: la tarea de mejorar la rentabilidad por cliente

El operador rojo, pese a tener nuevos dueños, sigue con su propia travesía por el desierto, y la caída en el Arpu es una tendencia que debe dar la vuelta

Vodafone

Mário Vaz, CEO de Vodafone España

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Vodafone España cambiará de manos muy pronto. El fondo británico Zegona intentará rearmar la compañía y elevar las curvas económicas. El Arpu (rentabilidad por cliente) será esencial para recuperar los márgenes. Ahora mismo la tendencia es negativa, y esa será una de las primeras tareas. 

El operador rojo ha vuelto a tener un retroceso en los ingresos en los primeros seis meses de su año fiscal. El dato positivo es que, al menos en el segmento móvil, consigue amortiguar la caída en la cartera de usuarios. El problema es que lo hace a costa de sacrificar el margen financiero. Algo que será una prioridad de los nuevos dueños. 

Según consta en los documentos económicos reportados por Grupo Vodafone, entre los meses de julio y septiembre el Arpu móvil fue de 11,6 euros. En el mismo periodo de 2022 esa cifra estaba en 14,3 euros. Desde entonces ha tenido una caída continuada, tanto en el segmento de contratos (13€) como prepago (5,8€). 

Otros mercados de la compañía como Alemania (12,9€), Reino Unido (15,3€) o Portugal (13,6€), sin embargo, han tenido crecimientos del Arpu en el segmento móvil.

La traducción de estas cifras es que para captar clientes lo está haciendo con fuertes promociones. Con esto consigue sostener a los clientes en su compañía, pero con bajos precios. 

Vodafone lo intenta 

Sobre los datos financieros, el operador rojo consigue atenuar la caída de ingresos. En concreto, la facturación de Vodafone España cayó un 1,8% en el primer semestre de su año fiscal (abril-septiembre), hasta los 1.929 millones de euros, debido a la menor facturación por servicios.  

Los ingresos por servicio de Vodafone alcanzaron los 1.731 M€ (-2,8%) debido a la elevada competencia en el segmento ‘low-cost’ de consumo, por una menor base de clientes y por la reducción de las tarifas de terminación móvil, parcialmente compensadas por el crecimiento de los servicios digitales para empresas y por la actualización de planes de precios con el IPC. 

De este modo, los ingresos por servicio de Vodafone España supusieron el 9% del total de la facturación del grupo por este segmento de actividad en la primera mitad de su año fiscal. 

En cuanto a la actividad comercial, en el segundo trimestre (julio-septiembre), la base de clientes de contrato móvil de Vodafone en España aumentó en 78.000, hasta un total de 13,9 millones, debido a las acciones comerciales de captación acometidas por la compañía. 

En tanto, los clientes de banda ancha fija se redujeron en 20.000, hasta 2,8 millones, y la base de clientes de televisión menguó en 16.000, hasta 1,4 millones. Asimismo, la base de líneas activas de internet de las cosas (IoT, por sus siglas en inglés) alcanzó los 6,1 millones. 

Además, la base de clientes móviles de contrato de Lowi se incrementó en 19.000 debido principalmente a la inclusión del 5G en las tarifas y de velocidades hasta 1 gigabit por segundo (Gbps) en fibra, aunque siguió impactada por la intensidad competitiva del ‘ultralowcost’.

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Raúl Masa

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