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Unicaja Banco designa a José Sevilla como presidente no ejecutivo y sucede a Manuel Azuaga
Unicaja ha informado este viernes a la CNMV que el Consejo de Administración ha acordado el nombramiento de Sevilla por cooptación
Unicaja Banco ha despejado todas las dudas que pudiera haber en el mercado y este viernes ha nombrado a José Sevilla nuevo presidente no ejecutivo de la entidad malagueña. La compañía ha remitido un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en la que indica que el Consejo de Administración ha acordado el nombramiento del exCEO de Bankia por cooptación.
Sevilla, que contaba con todas las papeletas para entrar en el Consejo de Administración de Unicaja, llega a la entidad para suceder a Manuel Azuaga, quien llevaba ocupando el cargo de presidente desde 2016. Con la llegada de Isidro Rubiales y las posterior adopción de las funciones ejecutivas del presidente, Azuaga pasó a ser presidente no ejecutivo del banco cotizado del Ibex, cargo que hereda José Sevilla.
Unicaja Banco cubre el Consejo
Con el nombramiento de Sevilla, Unicaja etierra de una vez por todas la crisis de gobernanza que ha copado el ambiente de la entidad en los últimos dos ejercicios.
Pese a que la llegada de Rubiales supuso un punto de inflexión y solventó la mayor parte de la crisis, aún había frentes abiertos. El anuncio de la salida prematura de Azuaga obligó a la entidad a meter una marcha más y acelerar la búsqueda de un nuevo presidente no ejecutivo.
En la terna de posibles presidentes no ejecutivos estaban, además de Sevilla, Ana Bolado, ex consejera de la entidad, y Antonio Román, antiguo director de negocio de Santander España. Finalmente, el Consejo de Administración se ha decantado por el antiguo consejero delegado de Bankia, quien ya estuvo en la mente de Unicaja hace algo más de medio año para ocupar el sillón de CEO.
José Sevilla es una personalidad distinguida en el sector, con experiencia en otros bancos y que, además, tiene buena sintonía con el Banco Central Europeo (BCE), cuestión de importancia por los problemas de gobernanza que ha arrastrado la compañía andaluza en los últimos dos años.
Por las nociones que tiene, Unicaja incluyó su nombre entre los posibles candidatos para suceder a Manuel Menéndez como consejero delegado hace alrededor de siete meses. Rubiales fue el escogido al entender el Consejo que la adaptación sería más rápida al tratarse de un perfil ‘de la casa’.
Pendiente de Tomás Olivo
Ahora, Sevilla lega para ocupar la silla de Azuaga, quien da un paso atrás definitivo y abre una nueva era en Unicaja Banco. La única tarea pendiente que queda en el Consejo de Administración es conocer al representante de la posición de Tomás Olivo. El empresario murciano es el segundo máximo accionista de la entidad andaluza con algo más del 9% del accionariado.
Como señalan fuentes financieras a este diario, Olivo sí quiere ocupar un puesto en el Consejo, y todo apunta a que tras la estabilización y nombramiento del nuevo presidente, el empresario comience a maniobrar para solicitar su asiento.
Por lo pronto, Unicaja ha tachado una tarea de su lista y ya tiene nuevo presidente no ejecutivo. Aunque la entidad ha anunciado el nombramiento al supervisor español, la entrada de Sevilla queda pendiente de ratificación por los accionistas en la próxima Junta.