Manuel Azuaga se despide de Unicaja con casi 1 millón de euros en el bolsillo entre sueldo y acciones
Unicaja informó el pasado jueves de que la Junta General de Accionistas será el próximo 5 de abril y en ella se someterá a votación la entrada de José Sevilla como nuevo presidente no ejecutivo
Manuel Azuaga cuenta los días para su salida de Unicaja. Después de siete años a los mandos de la entidad malagueña, el aún presidente no ejecutivo dirá ‘adiós’ el próximo 5 de abril, jornada en la que el banco celebrará la Junta General de Accionista en la que se someterá a votación la entrada de José Sevilla como nuevo ‘número dos’ de Unicaja.
Tras dos años de crisis interna, Azuaga se despedirá con la situación corporativa del banco saneada y con un equipo renovado, en el que el rastro de Liberbank se ha difuminado. Pese a ello, el presidente no ejecutivo no se irá con las manos vacías.
Tal y como Unicaja reportó en su Informe de Gobierno Corporativo, Manuel Azuaga percibió 780.000 euros por su condición de presidente ejecutivo hasta la incorporación de Isidro Rubiales, y después como directivo no ejecutivo.
Azuaga, el segundo que más cobra del Consejo de Unicaja
El histórico de Unicaja fue el segundo mando que más cobró de la entidad en 2023, solo superado por Manuel Menéndez, exCEO de la compañía, que percibió 842.000 euros.
Azuaga se despide de Unicaja con un sueldo un 13% inferior al que recibió durante 2022. Pese a ello, el todavía presidente no ejecutivo de la firma malagueña posee un paquete accionarial que asciende hasta el 0,013% de Unicaja, como indican los informes de la CNMV. Dicha posición supone una tenencia de 216.500 títulos de la compañía.
Teniendo en cuenta el último valor de Unicaja en el Ibex 35 (0,97 euros/acción), la posición de Azuaga vale alrededor de 210.000 euros.
Es decir, el directivo del banco malagueño ha puesto el punto y final a su carrera de Unicaja con cerca de un millón de euros en el bolsillo entre el salario y el valor de las acciones.
Azuaga pudo con Medel y Menéndez
Azuaga, quien pilotó al bando andaluz en la crisis interna que ha experimentado la entidad en los últimos ejercicios, logró sobreponerse a las críticas de Manuel Menéndez y a la presión del bando asturiano.
Tras varios bandazos en el Consejo de Administración, vaivenes accionariales, y problemas por ver quien se quedaba el poder en Unicaja, Azuaga logró mantenerse en el bastón de mando y ‘sacar’ de la entidad a otros históricos, como Braulio Medel, ex presidente de la Fundación Bancaria de Unicaja, que es la máxima accionista del banco, y que se posicionó a favor de Menéndez.
El exCEO tampoco tuvo mejor suerte, ya que a finales de julio sucumbió y anunció su salida de la entidad. Este paso valió para que Unicaja afrontase un futuro algo más certero y con el ‘ok’ del Banco Central Europeo (BCE), que estuvo pendiente de los problemas de gobernanza de la entidad.
Con el anuncio de la llegada de Isidro Rubiales como nuevo CEO, y, posteriormente, con el paso atrás para que el directivo ‘de la casa’ adquiriese las funciones de Azuaga, el presidente pasaría a ser no ejecutivo, manteniendo su asiento en el Consejo, y con funciones únicamente institucionales en la compañía.
El presidente anunció su salida a finales de noviembre
Este movimiento de Azuaga, y la llegada de Rubiales, valió para que el presidente no ejecutivo anunciara su salida el pasado 24 de noviembre. Como manifestaron diversas fuentes del mercado a este medio, la salida fue sorpresiva, ya que, aunque se conocían las intenciones de Azuaga, el Consejo no esperaba que fuese tan prematura.
De un modo u otro, y como detalló ECONOMÍA DIGITAL, Azuaga informó de su salida facilitando una «transición ordenada«. El directivo se mantendría en el cargo hasta que Unicaja encontrase a su sustituto.
Ahí es donde aparece José Sevilla, quien heredará el puesto de Azuaga y pasará a ser el nuevo ‘número dos’ de Rubiales el próximo 5 de abril, siempre y cuando los accionistas den su ‘ok’.
Unicaja informó de la entrada del ex consejero delegado de Bankia el pasado 2 de febrero. Así, la entidad, que también ha remodelado su organigrama y ha dado paso a nuevos directivos, como adelantó este medio, pone mimbres al Consejo y borra un poco más si cabe la crisis de gobernanza.
La plantilla se queja de los sueldos del Consejo
El banquero de 76 años dirá ‘adiós’ a una vida en Unicaja, pero lo hará con casi un millón de euros más en la cartera. Azuaga da paso a Sevilla, quien ya conoce los lares bancarios, tanto desde el punto de vista de la gestión, como en el lado corporativo.
Como primera misión -no de Sevilla, sino de Unicaja- está contentar a las plantillas. Aunque el banco llevó a cabo una mejora salarial que ha contentado a la mayor parte de los empleados, la patronal de Unicaja, CECA, está en conversaciones con los sindicatos para acometer una mejora de las condiciones laborales que, hoy en día, está lejos de darse.
El informe de Gobierno Corporativo publicado por Unicaja no ha hecho más que elevar el enfado de la plantilla del banco andaluz.
Y es que fuentes sindicales expresan a este diario la «injusticia» que supone que el Consejo de la entidad haya elevado sus salarios un 10% en 2023 cuando a las plantillas se le está ofreciendo menos de un 8%.
Analizando los precedentes, y tal y como está el ambiente, la resolución de esta ‘batalla’ deberá esperar por un tiempo.