Telefónica se suma a la empresa alemana y pide frenar a la ultraderecha

Telefónica se ha sumado a la iniciativa emprendida por las mayores compañías alemanas para alertar sobre el auge de los populismos de cara a las próximas elecciones europeas.

Grupos como Deutsche Bank, BMW, Siemens, Volkswagen o Bayer se han unido bajo el lema ‘Defendemos los valores‘, con el apoyo de la patronal de la industria del país y sindicatos.

Las multinacionales alemanas piden a sus 1,7 millones de empleados que participen en las próximas elecciones al Parlamento Europeo y resaltan «la importancia de la unidad europea para la prosperidad, el crecimiento y el empleo».

«El populismo y el extremismo están indisolublemente ligados al aislamiento y la exclusión«, afirman las compañías en un manifiesto.

Ese tipo de ideologías, advierten, «conducen a una reducción de la capacidad de innovación, de la producción económica y, en consecuencia, provocan menos riqueza afectando particularmente a los más vulnerables de la sociedad«.

Las compañías no se refieren directamente en sus declaraciones y manifiesto a la ‘ultraderecha’. Pero la alarma lanzada coincide con un aumento previsto del voto en las próximas elecciones europeas para los partidos que representan esta ideología, y con una serie de amenazas y ataques recibidos por políticos alemanes en los últimos meses por parte de ultras.

La tensión de cara a las próximas elecciones europeas de junio se ha elevado con el intento de asesinato del primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, quien el miércoles recibió cinco disparos. Fico es contrario a la inmigración, cercano al primer ministro húngaro Viktor Orban, y se ha mostrado opuesto a la ayuda a Ucrania frente a Rusia.

Algunos de los principales líderes de extrema derecha europea coincidirán este fin de semana en Madrid, en un acto auspiciado por Vox y al que asistirá el presidente de Argentina, Javier Milei.

Telefónica, contra la división de la sociedad

«Las empresas alemanas necesitan mano de obra cualificada y diversa desde más allá de nuestras fronteras para prosperar y mantener la competitividad en el futuro previsible», subrayan las compañías alemanas en su manifiesto. «Actualmente, Alemania se enfrenta a un déficit de 1,73 millones de puestos vacantes. En los próximos años, se necesitarán hasta 400.000 trabajadores cualificados al año», destacan.

Entre los grupos empresariales que apoyan la iniciativa se encuentra Telefónica Alemania. El consejero delegado de la filial de la multinacional española, Markus Haas, declara en el manifiesto que una «democracia fuerte es la base de una Europa fuerte, unida en diversidad».

Telefónica, con la que se puso ayer jueves en contacto este diario, no quiso comentar la información; fuentes de la operadora remitieron al comunicado de las compañías alemanas.

«Me preocupa que nuestra democracia esté en juego», advierte el consejero delegado de Siemens

«O2 Telefónica es sinónimo de conexión, luchamos contra la división de la sociedad«, dice el primer ejecutivo de la filial alemana de la multinacional española. «Nuestros clientes, empleados y socios provienen de orígenes diferentes», recuerda. «Estamos orgullosos de ello», afirma.

«Para nosotros, la diversidad es parte de nuestra propia concepción», señala. «Por eso participamos en ‘Defendemos los valores'», añade. «Una democracia fuerte es un requisito previo para una economía fuerte. Alemania necesita una UE eficaz para afrontar los retos que le aguardan», concluye.

Markus Hass dirige Telefónica Alemania desde enero de 2017. En febrero de 2022 la compañía extendió el contrato de su consejero delegado hasta el 31 de diciembre de 2025.

Telefónica cerró a finales del mes pasado la opa de exclusión sobre su filial alemana, alcanzando el 96,85% del capital, con una inversión estimada de 1.700 millones de euros.

«Los inversores que valoran Alemania por sus valores democráticos observan los acontecimientos con preocupación y dudan a la hora de invertir», alerta el consejero delegado de Deutsche Bank

Los principales ejecutivos de las mayores compañías alemanas realizan declaraciones similares a las de Markus Hass en el manifiesto.

«El populismo y el extremismo son un gran peligro para nuestra libertades básicas y a nuestro país», advierte Christian Sewing, de Deutsche Bank. «El racismo y la intolerancia no tienen cabida en una sociedad abierta y en una economía global», sostiene. «Los inversores que valoran Alemania precisamente por sus valores democráticos profundamente arraigados, observan los acontecimientos con preocupación y dudan a la hora de invertir», destaca.

«Sólo podremos superar la enormes desafíos de nuestro tiempo si todos los miembros de la sociedad se mantienen unidos y defienden valores clave como diversidad, respeto, igualdad de oportunidades e inclusión», dice Stefan Hartung, de Bosch.

«Me preocupa que nuestra democracia esté en juego«, revela el consejero delegado de Siemens, Christian Bruch. «Aislacionismo, extremismo y xenofobia son veneno para las exportaciones alemanas y para el empleo; no debemos dar espacio a los traficantes de miedo y caer en sus soluciones supuestamente simples», alerta.