Telefónica exprimió la guerra del fútbol hasta octubre
El operador, a pesar de haber rebajado su agresividad comercial en octubre, sumó 24.989 líneas móviles
La guerra del fútbol fue el pasado año el principal campo de batalla de las operadoras de telecomunicaciones. Telefónica hizo una apuesta ambiciosa por tenerlo todo, Orange le siguió y Vodafone se bajó de la puja. Y a partir de ahí los tres se enzarzaron durante tres meses en una pelea de ofertas por captar y retener a sus clientes de valor.
Los resultados que se han ido conociendo reflejan que Telefónica fue el gran vencedor en el robo de clientes a sus rivales directos. Los datos que acaba de comunicar la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia (CNMC), referidos a octubre, revelan que la compañía presidida por José María Álvarez Pallete ganó 24.989 líneas móviles en octubre, frente a la sangría que sufrieron sus dos competidores directos: Orange (-37.354) y Vodafone (-69.060).
Los datos oficiales del décimo mes del año, periodo que protagonizó un nuevo récord en portabilidades — clientes que saltan de una compañía a otra — , suponen que Telefónica, en tres meses, desde agosto hasta octubre, captó 127.133 líneas móviles de sus competidores, tras sumar los buenos datos de agosto (68.682) y septiembre (33.462).
El buen resultado de octubre llegó pese a la rebaja de su política comercial agresiva. La compañía anunció que ese mismo mes levantaría el pie del acelerador en sus ofertas, ya que había cumplido con el plan establecido : hacerse con los clientes de Vodafone, que había renunciado a los paquetes más atractivos de fútbol para esta temporada .
Cambio de tendencia en noviembre
Fuentes del mercado señalan que en noviembre la tendencia volvió a cambiar. El efecto fútbol se desvaneció —ya había arrancado la competición doméstica, La Liga, y la UEFA Champions League — y Telefónica perdió 4.000 líneas móviles. En portabilidades fijas la caída sería de 31.000 líneas, aunque otras fuentes matizan que esta portabilidad distorsiona la realidad del mercado minorista, motivo por el que la CNMC nunca ofrece el dato desagregado por compañías.
Con todo, siguiendo la información consultada, Telefónica habría cerrado 2018 con un saldo negativo de portabilidad en clientes móviles de 28.000 líneas, una cifra muy inferior si se tiene en cuenta que aglutina la mayor cuota de mercado y que sus dos competidores inmediatos sufrieron mucho más. Esta información, que analiza las líneas importadas y exportadas de noviembre y diciembre, todavía debe ser auditada por el regulador.
De este modo, Vodafone y Orange cerraron 2018 como las compañías más afectadas por el robo de clientes. Los datos agregados de portabilidad del pasado año dejaron a las compañías roja y naranja, tercera y segunda del mercado respectivamente, con un saldo negativo de portabilidades de aproximadamente 905.000 clientes de líneas móviles.
La guerra de MásMóvil
Del otro lado, MásMóvil, sin una oferta de televisión diferencial respecto a los tres grandes operadores, siguió robando clientes en el segmento del bajo coste. Competencia revela que en octubre volvió a ser la compañía que más competidores captó de la competencia (98.030 líneas móviles), si bien a final de año serían 600.000 líneas de móvil.
La compañía dirigida por Meinrad Spenger, cuarta en cuota de mercado — todavía a bastante distancia de los tres primeros —, consiguió este hecho sin precedentes gracias a las agresivas campañas low cost con hasta entonces sus cuatro marcas de móvil principales: Yoigo, Pepephone, MásMóvil y LlamaYa (recientemente compró Lebara).
El pasado año se batieron todos los récords de portabilidades. Fueron más de 10 millones de cambios solicitados, entre los 7,5 millones de líneas móviles y otros 2,5 millones de fijo y banda ancha. Estas cifras superaron a las de 2017 en casi un millón y también al anterior récord, de 2013, de portabilidad móvil.