Los sindicatos de Telefónica exigen un convenio de cinco años si endurecen las condiciones del ERE

Telefónica ha calculado que en España tienen un ‘excedente funcional’ que supera los 5.000 empleados. Ese es el punto de partida máximo por el que presentaría el actual ERE que se encuentra en fases previas de negociación. Los sindicatos, por su parte, se arman de recursos para que en las próximas reuniones puedan presionar al máximo a la compañía. 

Este lunes se ha conocido un nuevo capítulo en la negociación del expediente de regulación que Telefónica va a presentar sobre tres filiales. Han cifrado en 5.100 empleados el excedente laboral. No obstante, esto no significa que el ERE se vaya a presentar en estos términos, aunque empieza a dibujar el sentir de ambas partes. 

Por lo que respecta a los sindicatos, mantienen su fuerza en la negociación en paralelo del convenio de empresas vinculadas (‘III CEV’). El objetivo es que ambas cuestiones, ERE y convenio, vayan ligadas. 

Según ha podido conocer ECONOMÍA DIGITAL en fuentes laborales, pese a que la negociación del convenio está planteada para un margen temporal de tres años, no se descarta que pudieran darse cambios si las pretensiones de Telefónica sobre el ERE son muy duras para los empleados. 

Con esta medida los sindicatos intentarían blindar la negociación de próximos ajustes de plantilla. O, al menos, que se deje bien reflejado cómo se gestionará la salida ordenada de la plantilla. 

Telefónica y el ERE masivo 

Las cifras públicas que han trascendido generan una contradicción: Telefónica asegura que tiene un excedente de más de 5.000 personas, pero no puede prescindir de todas a la vez.

Esto supone una negociación ‘a plazos’ del actual ERE, del que no se conocen las cifras definitivas. Los sindicatos temen que, por ejemplo, ahora se plantee la salida de 3.000 trabajadores, y se vuelva a negociar más adelante —posiblemente cuando acabe el Plan Estratégico 2024-26, que coincide con el final del ‘III CEV’— la salida del siguiente ‘excedente’. Pero que, llegado ese momento, la compañía tenga más necesidades. 

Para que esto no suceda, los sindicatos se guardan el arma de cambiar el margen temporal del convenio o, incluso, introducir algunas cláusulas de obligado cumplimiento para que no haya ajustes de empleo en los próximos tres años. 

Una dura negociación 

Las fuentes consultadas aseguran que la negociación no será sencilla porque Telefónica ha elevado por lo alto el número de personas que necesita reubicar —dentro de la empresa o mediante el despido—. 

El sector de las telecomunicaciones ha entrado en una era de ligereza estructural. Las compañías se han convertido en empresas tecnológica que, realmente, vender servicios digitales. Eso provoca que no haga falta tanto personal. 

Además, Telefónica compite en España con operadores que tienen mayor agilidad, menos empleados, pero que a fin de cuentas le roban clientes y compiten por los mismos usuarios.