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El presidente de Sidenor negocia la entrada en Talgo como socio industrial
El Gobierno vasco celebra el interés del empresario por Talgo, pero pide discreción para que se consiga cerrar "una operación que fortalezca su capacidad"
El presidente de Sidenor, José Antonio Jainaga, estudia una posible entrada como socio industrial en la compañía ferroviaria Talgo, según han confirmado a Europa Press fuentes conocedoras del interés del empresario vasco en esta posible operación.
Un interés que se produce en un momento de incertidumbre para la empresa, tras el fracaso de la OPA por parte del grupo húngaro Magyar Wagon.
Informaciones adelantadas por El Correo y El Economista apuntan a que se haría a través de la corporación Mirai Investments, presidida por Jainaga que adquiriría acciones del fondo británico Trilantic, que querría salir del capital de Talgo.
Fuentes de José Antonio Jainaga consultadas por Europa Press, no han querido ni confirmar ni desmentir ese supuesto interés, si bien han recordado que el presidente de Sidenor siempre «tiene en su radar» analizar distintas operaciones con un «objetivo de permanencia» y, principalmente, en el sector industrial. En todo, caso, han apelado a la discreción en torno a este tema.
Las mismas fuentes han destacado la experiencia que tiene en este tipo de operaciones y han recordado la propia de Sidenor, ya que en mayo de 2016 miembros del equipo directivo de Sidenor, encabezados por el que era consejero delegado del grupo en aquel momento, José Antonio Jainaga, adquirieron la compañía a Gerdau por 155 millones de euros.
Postura «clara» del Gobierno vasco
La búsqueda de un socio industrial es algo en lo que se viene trabajando en Euskadi, donde Talgo cuenta con una planta en Rivabellosa en Álava, con una plantilla de cerca de 700 trabajadores, sin incluir el persona eventual y el de empresas auxiliares que trabajan para la firma. En el conjunto del país, la compañía cuenta con cerca de 2.500 trabajadores directos.
Desde las instituciones vascas apuestan por hacer lo necesario para que Talgo pueda continuar su actividad y no solo eso, sino aumentar su vinculación con Euskadi y especialmente con el territorio alavés.
Ante el interés de Jainaga, la portavoz del Gobierno vasco, María Ubarretxena, ha defendido un «sí a la industria en Euskadi y un sí al empleo en Euskadi» cuando se le ha preguntado por la opinión del ejecutivo ante esta situación.
Ubarretxena ha indicado, en todo caso, que «no es una cuestión sobre la que van a especular», y ha recordado que la semana pasada ya comunicaron que estaban manteniendo «conversaciones discretas» para apoyar a Talgo. En este sentido, ha señalado que la postura del Gobierno es «clara y conocida en este ámbito».
Así, ha remarcado que tiene que haber «un socio industrial con un plan industrial sólido y de futuro», y ha manifestado que, si se dan esas condiciones, el Gobierno vasco «analizará y acompañará, en su caso».
El propio Lehendakari, Imanol Pradales, manifestaba recientemente que, aunque es a Talgo al que corresponde buscar un socio industrial, el Gobierno vasco iba a «facilitar y acompañar» a la compañía en esa búsqueda.
«Discreción» para cerrar la operación
Por su parte, el diputado general de Álava, Ramiro González, ha pedido «discreción» sobre la posibilidad de que Jainaga entre como socio industrial en la compañía ferroviaria Talgo, ya que «el éxito de estas operaciones radica en la discreción con la que se lleven adelante».
Cuestionado por los periodistas al respecto en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno foral, González ha subrayado «la importancia que se consiga cerrar una operación, para fortalecer la capacidad inversora y productiva de Talgo».
«Cualquier cosa que se haga en este sentido le parecerá positiva a la Diputación Foral de Álava, quien está trabajando, junto con el Gobierno Vasco, en conseguir aumentar el arraigo de la empresa, su capacidad de inversión y su capacidad productiva, a través de un socio industrial y también de inversiones», ha señalado.
En este sentido, ha afirmado que, «sea la operación que sea», la Diputación y el Gobierno Vasco «acompañarán al inversor a través de los fondos adecuados».
«Si surge una oportunidad de un socio industrial y de socios inversores, se pondrán en marcha todos los mecanismos y capacidades que las administraciones tenemos para poder acompañar una operación de este tipo», ha anunciado, para reiterar «discreción, para que estas operaciones puedan prosperar».