La Sepi tendrá que convocar a la banca para financiar su entrada en Telefónica con la deuda disparada
La Sepi terminó el pasado ejercicio con una deuda bancaria de 3.040 millones, 315 millones más que un año antes.
Belén Gualda, presidenta de Sepi. EFE
Comentarios
La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) tendrá que solicitar una oferta a la banca para financiar su entrada en Telefónica con la deuda disparada, por encima de los 3.040 millones de euros.
El organismo público dependiente del Ministerio de Economía ha confirmado hoy martes que analiza su posible entrada en el capital de la primera operadora española. Pero para aprobar la operación, la Sepi tendrá que cumplir una serie de requisitos formales que han comenzado a aplicarse recientemente.
La institución presidida por Belén Gualda aprobó el pasado 11 de mayo la regulación de sus operaciones de endeudamiento, un procedimiento de control interno del que adolecía hasta ahora, como ha publicado hoy este periódico.
La potencial entrada del Estado a través de la Sepi en el capital de Telefónica requeriría una inversión de algo más de 1.000 millones de euros, para tomar un 5% del accionariado y poder contar con representación en el consejo de administración de la multinacional presidida por José María Álvarez-Pallete.
El organismo deberá superar una serie de fases formales para aprobar la financiación de la compra de Telefónica tras la implantación del nuevo procedimiento de control interno de las operaciones de endeudamiento.
Además de solicitar una oferta a los bancos «mediante la invitación al grupo de entidades financieras seleccionado«, también tendrá que adjudicar las ofertas «según la delegación del consejo de administración, previa información al Comité de Dirección con el apoyo del informe de la Dirección de Asuntos Jurídicos», así como «firmar los contratos por las personas apoderadas».
La Sepi también tendrá que realizar un análisis de mercado «y de la situación económica de la Sepi a fin de determinar la solución óptima de financiación»; la obtención de «las autorizaciones pertinentes»; y la aprobación de «los criterios de valoración de las ofertas con carácter previo a la solicitud de estas».
Deuda de más de 4.000 millones
La entrada en Telefónica supondría disparar aun más la deuda con la que la Sepi cerró el ejercicio pasado, situándola por encima de los 4.000 millones de euros.
El organismo público disparó su deuda con entidades de crédito el pasado año hasta los 3.040 millones de euros –315 millones más que en 2021– de los cuales 2.165 millones correspondían a préstamos y 875 millones a pólizas de crédito.
Además, la Sepi elevó también la deuda de empresas del grupo y asociadas el pasado año, hasta los 431 millones de euros, desde los 225 millones de 2021.
La Sepi explica en sus últimas cuentas, consultadas por este diario, que ha analizado en los últimos años la oportunidad de «iniciar los trámites para la emisión de un programa de pagarés» como alternativa a la contratación de créditos bancarios. Pero añade que la carga de trabajo, con la creación del Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas, lo ha impedido.
La aparición de la Sepi en el capital de Telefónica respondería a la compra del 9,9% del grupo por parte de la operadora saudí STC, que todavía tiene que solicitar al Gobierno permiso para llevar a cabo la operación. Con este paso, el Ejecutivo trataría de asegurar ‘la españolidad’ de una de las empresas más estratégicas para España.
El grupo saudí presentó ayer lunes sus resultados hasta septiembre, subrayando su apuesta por Telefónica y reafirmando su intención de alcanzar el 9,9% de la compañía española. STC logró en los primeros nueve meses del año un beneficio de 2.700 millones de euros, un 17% más, y en el último año ha doblado su cifra de deuda, por encima de los 5.000 millones.
