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Sánchez cumple con el PNV y ejecuta el traspaso de Cercanías al País Vasco dos días antes de las elecciones
Pedro Sánchez y el PNV acordaron el traspaso el pasado mes de febrero y ha sido publicado hoy viernes en el BOE.
Regalo de última hora de Pedro Sánchez al PNV. El Gobierno ha ejecutado el traspaso de Cercanías al País Vasco, dos días antes de que se celebren elecciones en la Comunidad Autónoma, este domingo, en las que el partido nacionalista parte con una ligera desventaja respecto a EH Bildu, según las últimas encuestas.
El traspaso del servicio de transporte de viajeros por ferrocarril de cercanías por parte de la Administración del Estado al País Vasco fue acordado por representantes del Gobierno central y del vasco en una reunión telemática mantenida en la tarde del viernes 23 de febrero, y era una de las condiciones impuestas por el PNV para apoyar la última investidura de Pedro Sánchez como presidente.
La transferencia de las competencias ha sido publicada hoy en el BOE, y tendrá efectividad una vez se suscriba el acuerdo de subrogación de la Comunidad Autónoma del País Vasco en la posición contractual del Estado con Renfe, en menos de seis meses a contar desde hoy viernes 19 de abril.
La comunidad autónoma vasca asume el ejercicio «del conjunto de las funciones de la Administración del Estado en relación con los servicios de cercanías de ancho ibérico y ancho métrico (…)».
Las funciones que asume País Vasco comprenden la regulación, planificación, coordinación e inspección de esos servicios, la potestad tarifaria, su regulación y ordenación, las compensaciones que se impongan a las operadoras…
El acuerdo no contempla la asunción por parte de la Comunidad Autónoma de los servicios en la red de ancho estándar europeo «sin que ello suponga su renuncia a asumirlos en el futuro«. La Administración del Estado se reserva «tanto la regulación como las funciones ejecutivas relativas al ejercicio de las competencias que le corresponden».
Las dos administraciones crearán una Comisión de Cooperación y Seguimiento que analizará «de común acuerdo» las necesidades de la infraestructura ferroviaria «y su planificación económica y de ejecución».
El traspaso de las líneas ferroviarias de Bilbao Abando Indalecio Prieto-Santurtzi; Desertu Barakaldo-Muskiz; y Bilbao Mercancías-Santurtzi está sujeto el traspaso a la construcción y puesta en servicio de un nuevo acceso ferroviario al Puerto de Bilbao, la denominada Variante Sur Ferroviaria.
Los servicios de cercanías de ancho ibérico y ancho métrico cuyas funciones son objeto de traspaso comprenden las del Núcleo de Cercanías de ancho ibérico de Bilbao (Bilbao Abando-Barakaldo-Santurtzi; Bilbao Abando-Barakaldo-Muskiz; y Bilbao Abando-Llodio-Orduña); las del Núcleo de Cercanías de ancho ibérico de San Sebastián (Irún-San Sebastián-Tolosa-Brinkola); y las del Núcleo de Cercanías de ancho métrico de Bilbao (Línea C4f Bilbao-Balmaseda).
Además, la Comunidad Autónoma del País Vasco asume el ejercicio de las funciones en relación con los servicios ferroviarios entre Karrantza y Bilbao, Araia-Vitoria/Gasteiz y Vitoria/Gasteiz con Manzanos-Ribera Baja, «como parte de futuros servicios de cercanías».
El traspaso del servicio ferroviario de Cercanías al País Vasco se suma al adoptado el pasado mes de noviembre por el Gobierno de Sánchez y la Generalitat de Cataluña para el traspaso de Rodalies.
Según explicó el mes pasado el presidente de Renfe, Raül Blanco, el traspaso de los servicios ferroviarios al País Vasco es más sencillo que en el caso de Cataluña. Blanco indicó que en el primer caso se trata de un cambio en la titularidad de la operación, mientras que en el caso catalán implica también la creación de una sociedad mixta.
La publicación del traspaso de estas competencias ferroviarias al País Vasco se produce también en la misma semana en la que el Ministro de Transportes, Óscar Puente, ha tratado de desviar la atención apuntando a la competencia del operador francés Ouigo a Renfe y entrometiéndose en la oferta presentada por un grupo húngaro por Talgo.