Risto Mejide y Sandro Rosell suman pérdidas con su marca de ropa
Risto Mejide y Sandro Rosell esperan la llegada de un inversor, que impondrá cambios en la dirección y en el enfoque comercial de Grifone
La empresa Textil Seu SA, propietaria de la marca de ropa técnica y deportiva Grifone, acumula más de diez millones de euros en pérdidas en tan sólo seis años. Acaban de presentar al registro mercantil, con retraso, las cuentas de 2015, que cerraron con otro roto de 2,5 millones de euros.
Entre los socios de Textil Seu figuran las empresas del televisivo Risto Mejide (Before Share), del expresidente azulgrana Sandro Rosell (True Oasis Cottage) y de los exbanqueros andorranos Higini y Ramon Cierco (Naturtec Industries). Estos últimos estuvieron al frente de BPA y de Banco Madrid hasta que estas entidades financieras fueron intervenidas en marzo de 2015.
Risto Mejide: hace un año se quedó con el 5% de la marca Grifone cuando estaba a punto de naufragar
A diferencia de Rosell y de los hermanos Cierco, que hasta ahora son los principales accionistas, Mejide tan sólo ostenta un 5%. Curiosamente, se convirtió en socio en diciembre de 2015, cuando la compañía estaba a punto de naufragar. Unas semanas antes difundió a través de las redes sociales un selfie en el que se le veía, en compañía de su novia, vistiendo prendas de Grifone.
El comprador ya tiene la due diligence
Fuentes de la empresa indican que se están preparando “cambios” que afectarán al accionariado, al equipo directivo y al enfoque comercial. Estas fuentes confirman que se ha encargado una due diligence, aunque no aportan más detalles. Mediante este procedimiento de auditoría un potencial comprador evalúa la situación de la empresa de cara a su adquisición. Mantienen en secreto su identidad y si su intención es comprar la totalidad de las acciones o un paquete mayoritario.
Los anunciados “cambios” se llevarán a cabo a mediados de mayo. Probablemente, supondrán la salida de Emili Sabadell como primer ejecutivo de la compañía. Sabadell fue team manager del FC Barcelona cuando lo presidía Rosell. Este último se lo llevó a Grifone en 2015 para intentar enderezar el rumbo. No lo ha conseguido.
Suben las pérdidas y bajan las ventas
Textil Seu lleva años encadenando pérdidas. En 2015, fueron 2,5 millones de euros; en 2014 y 2013, cerca de 1,6 millones; en 2012, 2,3; y en 2011, 1,2. Además, según las cuentas del 2015 que acaban de depositar en el registro mercantil, mantiene una deuda a corto plazo de 2,3 millones de euros (1,7 millones es con los bancos) y otra a largo plazo de 2,1 millones.
En los tres últimos ejercicios (2013-2015) las ventas se han situado alrededor de los 2,1 millones de euros, pero con tendencia decreciente, lejos de los 4,5 millones obtenidos en 2011 o los 3,4 de 2012.
Fuentes de la empresa admiten que se encuentran en una situación “complicada” pero niegan rotundamente que se encaminen al cierre. Textil Seu, domiciliada en la seu d’Urgell (Lleida), cuenta con catorce empleados. Encargan la producción en otros países, básicamente de prendas para deportes de invierno, y se encargan de su comercialización con la marca Grifone.