Los Puig ganan 17 millones con su firma familiar en la antesala de la salida a Bolsa del grupo de ‘lujo asequible’
El holding de Marc Puig y sus hermanos Mariano, Daniel y Antonio dispara los ingresos por dividendos
Los Puig encaran la salida a bolsa del gigante de la belleza que lleva el nombre del clan familiar desde la comodidad. El grupo propietario de marcas de lujo como Paco Rabanne, Carolina Herrera o Jean Paul Gaultier y el resto de negocios de los Puig han salvado el golpe de la pandemia y han mejorado sus resultados en los últimos años, algo que se deja notar en los bolsillos de la familia que levantó el impero catalán del lujo.
Sin ir más lejos, Consilium, el holding controlado por Marc Puig, el presidente de Puig, y sus hermanos Mariano, Daniel y Antonio, catapultó sus resultados en 2022 gracias los jugosos dividendos de las empresas en las que invierte. La firma familiar ganó 17,5 millones de euros en el pasado ejercicio, en comparación con un 2021 en el que registró pérdidas por 5 millones de euros.
Como toda sociedad de cartera, el holding de los hermanos Puig obtiene sus ingresos a partir de los dividendos aportados por las sociedades en las que invierte. En este caso, la empresa facturó 29,5 millones de euros en el pasado ejercicio, de los cuales 28,7 provienen de dividendos percibidos.
Esta cifra corresponde a las retribuciones obtenidas por los pasados ejercicios de sus inversiones, es decir, provienen de los resultados de Puig y del resto de negocios de la familia del año en 2021. Ese año, la firma catalana alcanzó el mejor resultado hasta la fecha (ya superado en 2022), con unos ingresos de 2.585 millones de euros y un beneficio neto de 234 millones. La sociedad dominante del grupo aprobó una distribución de dividendo de 23,5 millones de euros en junio de 2022.
Por este motivo, los resultados de Consilium de 2022 son mucho más redondos que los de 2021, dado que, en este caso, reflejan las cifras alcanzadas por las empresas en las que invierte la familia de 2020. En un año marcado por la pandemia, en el que, por ejemplo, Puig facturó 1.537, un 24% menos, y perdió 70 millones de euros; el holding familiar apenas facturó un millón de euros y registró pérdidas valoradas en 5 millones.
Puig seguirá dando alegrías al clan familiar
Todo apunta que Consilium no hará más que hinchar sus números. Puig ya no nota en su negocio ni rastro del covid y volvió a batir récords en 2022, con un beneficio neto de 400 millones de euros, después de disparar la facturación hasta los 3.620 millones de euros. En una reciente entrevista al Financial Times, Marc Puig aseguró que la empresa alcanzaría una facturación de 4.000 millones de euros a cierre de este año, por lo que el dividendo que aspira a recibir en los próximos ejercicios será todavía más jugoso.
Todo esto mientras Puig se prepara para empezar a cotizar. En la misma entrevista al prestigioso periódico británico, el presidente del conglomerado confirmó los rumores de salida al mercado bursátil. La empresa ha contratado a Goldman Sachs y JPMorgan para coordinar su salida al mercado bursátil, con una valoración estimada de entre 8.000 y 10.000 millones de euros.
El primer ejecutivo de la compañía recalcó que, en cualquier caso, los actuales propietarios mantendrían el control de la empresa, aunque también consideró beneficioso para el negocio tener que rendir cuentas a un inversor externo.
«Pueden surgir dificultades, especialmente en la transición entre generaciones: la búsqueda de liderazgo, una falta de comprensión, una pérdida de pasión», dijo el presidente del grupo. «Tener que rendir cuentas ante el mercado conlleva una disciplina y un rigor que garantiza que esos problemas no surjan», agregó.
Más allá de Puig, Consilium también factura dinero procedente de otras inversiones de la familia catalana. Entre ellas, destacan sus negocios inmobiliarios canalizados a través de Inmo, la sociedad en la que controlan su participación en Colonial, que ganó 10 millones de euros en 2022.