Pedro Saura crea un plan para frenar las pérdidas multimillonarias de Correos
Con una deuda acumulada de más de 330 millones de euros, el recién nombrado presidente busca recuperar a largo plazo las cuentas de Correos
Pedro Saura, designado como presidente del grupo Correos el pasado 29 de diciembre, se enfrenta al desafío de rescatar la empresa estatal de una profunda crisis financiera. Con pérdidas que superan los 330 millones de euros en los últimos dos años, Saura se ha propuesto como objetivo principal la recuperación a medio y largo plazo de las cuentas de Correos.
El presidente, quien ha admitido no haber visto antes una empresa pública en una situación tan crítica, ha iniciado un proceso de transformación con el apoyo de la consultora KPMG. Los sindicatos CCOO y UGT, representantes de la entidad, han reconocido la delicada situación de la empresa con una plantilla de 50.000 trabajadores y pérdidas acumuladas de 1.152 millones de euros desde 2018.
A pesar de haber cerrado en positivo en 2019 tras cuatro años en números rojos, la pandemia en 2020 golpeó fuertemente a Correos, resultando en pérdidas de más de 260 millones. En los años sucesivos, las cifras negativas continuaron, sumando más de 100 millones en 2021 y más de 200 millones en 2022.
Además de estabilizar las finanzas, Saura enfrenta otros desafíos, incluyendo el restablecimiento de un diálogo social colapsado con el anterior presidente, la viabilidad de las nuevas líneas de negocio, la rentabilidad del negocio tradicional y las resoluciones del órgano de Competencia (CNMC) sobre precios.
Un mes con Saura en Correos
En su primer mes como presidente, Saura se ha reunido con CCOO y UGT, y ha expresado su voluntad de trabajar en colaboración con los sindicatos mayoritarios para garantizar el futuro y la estabilidad laboral de la plantilla. Sin embargo, la parte sindical dejó claro que rechazarán cualquier proyecto que se base «exclusivamente» en el ajuste «puro y duro y la reconversión».
Simultáneamente, Pedro Saura ha llevado a cabo cambios en la cúpula directiva de Correos, asumiendo una nueva etapa de liderazgo en la compañía postal. Los movimientos incluyen relevos en la dirección de Operaciones, con la entrada de Olga García; dirección Comercial, ocupada ahora por Yolanda Orcajada; dirección financiera, bajo la responsabilidad de Javier Monzón; dirección general de Correos Telecom, liderada por Enrique Cervera; Organización, Tecnología y Transformación Digital, a cargo de Isabel Alcantarilla; dirección financiera de Correos Express, asumida por Santiago Ferrer, y Estrategia, ahora bajo la dirección de José Miguel Moreno.
La CNMC pide nuevas tarifas
La CNMC ha señalado que los precios con descuento ofrecidos por Correos a grandes clientes, como empresas y administraciones, para sus envíos de correspondencia, se sitúan por debajo de los costes reales de prestación del servicio. Específicamente, la CNMC destaca que en los envíos de cartas de hasta 20 gramos y hasta 50 gramos, los descuentos aplicados a estos clientes incumplen la obligación de Correos de orientar los precios a los costes reales, según los costes históricos totalmente distribuidos.
Pedro Saura, responsable de Correos, se enfrenta ahora a la necesidad de abordar las recomendaciones emitidas por el órgano regulador. Entre estas recomendaciones se encuentra la inclusión de un nuevo modelo de costes al alza en la normativa sectorial.
Este nuevo modelo deberá ser «más adecuado» a la evolución de la demanda y garantizar que los precios ofrecidos por Correos a sus grandes clientes reflejen fielmente los costes reales asociados con la prestación del servicio de envío de correspondencia.
Más de 7.000 nuevos empleos
El pasado 23 de octubre, 7.757 personas obtuvieron un empleo fijo en Correos, gracias a las tasas de reposición aprobadas para los años 2020 y 2021. La medida tiene como objetivo principal abordar la elevada temporalidad y precariedad laboral que ha afectado a la empresa postal en los últimos años, demandas que los sindicatos destacaron en la anterior etapa presidencial.
Los nuevos empleados asumirán responsabilidades clave, incluyendo el reparto de envíos, tareas logísticas y atención al cliente en oficinas postales distribuidas por toda España.
Sin embargo, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha expresado su preocupación, señalando que la cantidad de nuevos empleados «no es suficiente» para abordar las necesidades de personal de la empresa. CSIF ha advertido que esta iniciativa es «solo un parche» y ha destacado que, según sus cifras, en la última década se han perdido más de 15.000 empleos en Correos debido a amortizaciones de plazas, jubilaciones y traslados de trabajadores a otras administraciones.