Pedro Sánchez se va en junio a Bruselas: el rumor que corre como la pólvora por el Ibex

Un rumor corre como la pólvora por los centros de decisión empresariales y jurídicos españoles, el Ibex y los grandes despachos: Pedro Sánchez dejará la presidencia del Gobierno español para ocupar este año un alto cargo en las instituciones europeas.

En lo que parece una reedición del rumor ‘Pedro Sánchez se va de presidente de la OTAN’, que se extendió a mediados del pasado año, tras la histórica derrota electoral sufrida por el PSOE en las elecciones autonómicas y municipales del mes de mayo, ahora el runrún, quizá el deseo, de que el líder del partido socialista pone rumbo a Bruselas en junio, sale a relucir con fuerza en cónclaves empresariales y jurídicos llegados los postres: «Sánchez lo que quiere es ser Presidente de Europa».

Al igual que la idea de que Sánchez apuntaba a la presidencia de la OTAN coincidió en el tiempo con el supuesto momento en el que la Alianza Atlántica debía designar nuevo Secretario General -lo que le daba cierto sustento al rumor-, en esta ocasión, la posibilidad de que el Presidente del Gobierno español vaya a ocupar un alto cargo en Europa se plantea coincidiendo con un periodo de relevo crítico en las altas instancias europeas.

«Pedro Sánchez tiene mucha mejor imagen en Europa que en España», dicen

Entre el 6 y el 9 de junio de este año los votantes de los 27 países de la Unión eligen a sus representantes en el Parlamento Europeo, en unas elecciones en las que la UE ha pedido ayuda a la cantante estadounidense Taylor Swift para movilizar al voto joven. Las elecciones también determinarán quién presidirá la Comisión Europea.

El crecimiento previsto de los partidos euroescépticos y de extrema derecha debería impulsar a la izquierda a consensuar la presentación de unos candidatos con cartel. Y aunque en España parezca que Pedro Sánchez no lo tiene, en el exterior el líder del PSOE sí cuenta con simpatías.

«Pedro Sánchez tiene mucha mejor imagen en Europa que en España; los socialistas alemanes están rendidos ante él; estalla la guerra en Gaza y el primero en apoyar la creación de un Estado palestino, que es lo que ahora defienden el resto de líderes occidentales, es Sánchez. También tiene buena imagen entre el electorado joven europeo», comenta un prestigioso abogado español, en contacto continuo con las mayores multinacionales del país. «En junio se va a Bruselas«, augura.

A principios de este mes, el expresidente del Gobierno belga Charles Michel, presidente del Consejo Europeo -el organismo que fija las directrices de la Unión- anunció su decisión de participar en las próximas elecciones de junio y abandonar el cargo.

Los 27 Jefes de Gobierno de la UE tienen seis meses para elegir al sucesor de Charles Michel; si no lo hicieran en ese plazo, el país que en ese momento ejerza la presidencia semestral del Consejo de la Unión Europea impondrá al presidente del Consejo Europeo.

Hungría recoge el testigo de Bélgica el próximo mes de julio al frente del Consejo de la UE, lo que significa que el primer ministro de Hungría, Víktor Orbán, asumiría la presidencia del Consejo Europeo. Las riendas de Europa las tomaría así el más euroescéptico entre los líderes europeos, el amigo húngaro de Putin.

«El Partido Popular apoyaría la candidatura de Pedro Sánchez en Europa«, asegura un empresario curtido en operaciones multimillonarias en España desde el pasado siglo.

«No es solo que se lo quitaran de encima en España, es que el Partido Popular europeo realmente ve como una amenaza seria a Orbán y a la extrema derecha», dice. «Y si encima Trump lograra este año ser otra vez elegido Presidente de Estados Unidos, el único dique frente a Rusia y la invasión de Ucrania será la Unión Europea», añade.

Primera Presidenta de España

El portugués António Costa, el holandés Frans Timmermans o la finlandesa Sanna Marin, son los nombres que con más fuerza suenan entre el socialismo europeo para ocupar un puesto de relevancia en las instituciones de la UE. Sin embargo, los tres tienen también razones para apartarse de la carrera.

Frans Timmermans dejó en julio del pasado año la vicepresidencia de la Comisión Europea para presentarse a las elecciones generales de Países Bajos. Pero fue el ultraderechista y euroescéptico Geert Wilders quien el pasado mes de noviembre se alzó con la victoria en las elecciones en el país provocando un terremoto político.

Sanna Marin perdió las elecciones generales de Finlandia el pasado mes de abril, poniendo fin a tres intensos años como Primera Ministra del país. Y António Costa tuvo que dimitir en noviembre como Primer Ministro de Portugal al verse envuelto en una trama de corrupción de proyectos energéticos.

Frente a tres candidatos derrotados, Sánchez emerge como el más astuto de todos, como el único líder socialista que sí ha sabido contener en su país a la extrema derecha.

«En España, el desgaste de Sánchez por sus concesiones a los independentistas catalanes es tremendo; sin embargo, en Europa se ve todo esto con mucha más distancia», insisten las fuentes consultadas. «Lo de la OTAN en realidad era imposible», dicen ahora. «Estados Unidos no hubiera permitido que Sánchez fuera Secretario General de la OTAN, por sus escarceos con Venezuela y demás».

«María Jesús Montero será la primera Presidenta de España», pronostican los que ven a Sánchez haciendo las maletas en junio rumbo a Bruselas.

No hay quien tosa ahora a la Ministra de Hacienda, ascendida con galones a Vicepresidenta Primera del Gobierno, en el Consejo de Ministros, tras la salida de Nadia Calviño y el nombramiento de Carlos Cuerpo –ni su madre se lo creía– como nuevo ministro de Economía.

«Todas las mujeres que han dado un paso adelante y han dicho sí al Presidente del Gobierno van a encontrar esa fuerza que mutuamente nos tenemos que trasladar», dijo una empoderada Montero el pasado 29 de diciembre en la sede del Ministerio de Economía, en la ceremonia de traspaso de carteras. «La política es lo mejor que le puede pasar a uno (…)», afirmó.