La Nochebuena en la que Andic puso fin a su aventura en Sabadell con Lara y Bañuelos
Isak Andic, junto con los dueños de Porcelanosa, Planeta, Titanlux y la inmobiliaria Astroc invirtieron 490 millones en Sabadell en el año 2006.
La próxima semana se cumplirán seis años desde que Isak Andic, fallecido este sábado en un accidente de montaña, y sus socios en Sabadell anunciaran, en la Nochebuena de 2018, la ruptura de su pacto de inversión en el banco presidido por Josep Oliu.
La aventura del fundador de Mango junto con otros ilustres representantes de la empresa catalana en la entidad se saldó con pérdidas millonarias, cientos de millones de euros.
En el año 2006 Josep Oliu, junto con Andic, José Manuel Lara Bosch, presidente de Planeta (fallecido en 2015), y Joaquín Folch-Ruiseñol (de la familia fundadora de pinturas Titanlux) adquirieron 81,6 millones de acciones de Banco Sabadell, a un precio de 6,09 euros por acción, en total 490 millones de euros, a través de una sociedad conjunta, Famol Participaciones.
En julio de 2006 los empresarios en Sabadell suscribieron un pacto para limitar la transmisión de acciones de la entidad. Al mismo se adhirieron también el presidente de Porcelanosa, Héctor María Colonqués Moreno, y el empresario Miguel Bosser Rovira. Y a última hora se sumó una estrella fugaz del sector inmobiliario español, Enrique Bañuelos, el fundador de Astroc.
La economía española estaba en esos tiempos a punto de sumergirse en la peor crisis vivida en democracia, pero España era una fiesta y nadie parecía darse cuenta. Los precios del mercado inmobiliario no dejaban de crecer, se construían más casas que nunca y los beneficios de los bancos eran de récord.
En 2006 Sabadell logró el mayor beneficio de su historia, 908 millones de euros, una cifra que no ha vuelto a superar hasta el año 2023. Además de Oliu, sus nuevos socios en el banco también vivían momentos felices.
El grupo Porcelanosa, al ritmo del boom inmobiliario, registraba esos años resultados récord; Enrique Bañuelos, tras sacar su inmobiliaria Astroc a Bolsa, entraba en la lista Forbes de los más ricos del mundo; y Mango alcanzaba ese 2006 una facturación de 1.257 millones de euros, casi un 10% más que un año antes.
Tras su inversión en Sabadell, Andic, Folch-Ruiseñol y Lara pasaron a formar parte del consejo de administración del banco. En 2013 el dueño de Mango dejó su puesto en el consejo.
Dos años después de que Oliu, Andic, Lara, Folch-Rusiñol, Bañuelos, Colonqués y Bosser Rovira firmaran el acuerdo de accionistas en Sabadell, ocurrieron dos quiebras que representan el fin de un exuberante crecimiento económico, tanto en España como en el resto del mundo, y el descenso del valor del banco catalán en Bolsa.
En julio de 2008 se declaró en concurso de acreedores la inmobiliaria Martinsa Fadesa, la mayor quiebra empresarial ocurrida en España, por un valor de unos 7.000 millones de euros. Y en septiembre de ese mismo año cayó el banco estadounidense Lehman Brothers. Explotaba la burbuja inmobiliaria en España y la financiera a nivel mundial iniciándose una crisis económica cuyos efectos aun persisten.
Andic era «cliente y ferviente hincha» de Banco Sabadell, ha recordado Josep Oliu
Andic estaba presente en el capital de Sabadell a través de su sociedad Mayor Vent, que tenía el 40% de Famol Participaciones. De los socios de Oliu que en 2006 acordaron la compra de acciones del banco, el dueño de Mango fue el que mayores pérdidas registró.
En 2015 la sociedad de Andic provisionó por deterioro un importe de 389 millones de euros tras registrar pérdidas por valor de 97 millones de euros; el valor del patrimonio de Mayor Vent pasó de los 280 millones en 2014 a 151 millones un año después. La pérdida de valor de sus acciones en Sabadell afectó a sus otras inversiones.
La firma de inversión de Andic formaba parte a su vez del holding Punta NA, a través de la cual el empresario textil gestionaba también su participación en Mango MNG. Holding. Punta NA pasó de ganar 50 millones de euros en 2014 a obtener un beneficio de 205.000 euros un año después.
Andic y sus socios en el banco persistieron en los peores momentos de la crisis económica y financiera en su apuesta sobre Sabadell, acudiendo a sucesivas ampliaciones de capital.
Hasta la Nochebuena de 2018, cuando el valor en Bolsa de Sabadell cotizaba por debajo del euro y los empresarios comunicaron a la Comisión Nacional del Mercado de Valores que habían decidido ya dejar sin efecto el pacto firmado en julio de 2006.
A pesar del roto que la inversión en Sabadell provocó en las sociedades de Andic, no hubo reproches. El presidente de Sabadell ha destacado la fe que el dueño de Mango tenía depositada en el banco.
En un artículo titulado Adiós, Isak, amigo del alma, Josep Oliu contó el domingo que Andic era «cliente y ferviente hincha del banco«. «Confiaba tanto en el valor y la capacidad de desarrollo de Mango que creía que no debíamos dejar que ningún otro banco trabajara con él. Así era Isak».
«Se convirtió, junto con José Manuel Lara, en accionista significativo hasta que la tremenda crisis del 2008 puso fin a su etapa bancaria, con importantes pérdidas para todos. A pesar de ello, nunca perdimos nuestra profunda amistad», recordó Oliu.