Este es el mejor momento del año para cambiar de compañía de móvil
Entre octubre y diciembre las operadoras lanzan toda clase de ofertas para aumentar su cartera de clientes. Pero hay que tener en cuenta varios puntos importantes de la portabilidad
En su lucha por conseguir nuevos clientes las compañías de telefonía móvil bombardean a sus potenciales clientes con toda clase de ofertas, mientras que buscan retener a los actuales con una batería de promociones.
Pero la portabilidad, o sea el cambio de compañía, existe desde que los móviles pusieron un pie en el mundo.
Y aquí encontramos dos clases de consumidores: los que suelen cambiar de empresa continuamente aprovechando rebajas de precios y la posibilidad de llevarse una terminal gratis, o los que son fieles a una operadora y permanecen más por pereza de gestionar un cambio que por satisfacción con el servicio.
Las grandes operadoras pierden más de 9 millones de líneas
Cabe recordar que según la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia) hasta mayo de este año las grandes compañías como Movistar, Orange y Vodafone han perdido nueve millones de líneas en la última década.
¿Y a dónde se han ido? Pues a las nuevas OMV (operadoras móviles virtuales), como MásMóvil, Lowi o Yoigo, que han logrado contar con 6,5 millones de nuevos clientes desde enero de 2013.
Por ello, para aquellos que contemplan dar el salto a otra compañía, vamos a revelar cuál es el mejor momento para cambiar de empresa, así como lo que se debe hacer (y lo que no) cuando se decide cambiar de operadora.
Puntos clave de la portabilidad
Conviene recordar, precisamente, algunos de los consejos que da la CNMC para aquellos que quieren contratar otra compañía y abandonar a la que tiene.
No hay que ponerse ansioso con el cambio, que el proceso suele durar hasta cinco días laborales; aunque por lo general es de dos días hábiles.
La portabilidad suele durar dos días hábiles, aunque legalmente las telecos tienen cinco días para ejecutarla
Pero en caso que dure más tiempo o que haya problemas, se puede reclamar en la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones.
En caso de arrepentimiento, hay una ‘ventana de cambio’ inmediata, de un día y medio desde que se hace efectiva. Por ello hay que estar atento a los primeros pasos en la nueva para comprobar que todo esté como se espera.
Atención a las fechas de la portabilidad
La OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) recuerda que si un operador no respeta los dos días hábiles para tramitar la baja y luego cobra por un período posterior a la fecha en que debió terminar el servicio, el usuario tiene derecho a solicitar una factura rectificada.
Si una compañía llegara a facturar períodos completos cuando el servicio había dejado de prestarse, “es una práctica abusiva, y por lo tanto, ilícita”, advierte esta organización.
Cuidado con la permanencia
Cuando una compañía plantea un período de permanencia, que suele ser de 18 a 24 meses, este alcanza tanto a la tarjeta SIM como al móvil de regalo o promoción que se ofrece.
Es algo importante a tener claro, porque muchas personas renuncian al móvil y piensan que pueden irse de la compañía cuando quieran, cuando están atados a un contrato por esta pequeña tarjeta.
En caso que la voluntad de irse sea demasiado grande, hay que pagar una penalización, que tiene que ser proporcional al tiempo que queda hasta que termine la permanencia.
La portabilidad es un trámite gratuito, pero que tiene un coste. De hecho en algunos países europeos el cliente tiene que pagar este proceso de cambio, como es el caso de Malta, Eslovaquia o la República Checa, donde hay que abonar entre 45 y 33 euros.
Cancelaciones y contraofertas de las compañías
La CNMC recuerda que las compañías no pueden bloquear la portabilidad porque todavía queden facturas sin pagar.
Pero lo que sí suele suceder es que cuatro de cada diez procesos de cambio queden cancelados. ¿La razón? Que las operadoras tratan de retener a sus clientes con nuevas ofertas y promociones, y muchas veces tienen éxito.
Y no es que sean generosos: es que la ley les obliga a realizar una contraoferta cuando un cliente decide marcharse.
El momento ideal para cambiar de compañía
Ya con todos estos puntos en claro, quien esté tentado con cambiar de compañía móvil y quiere aprovechar el mejor momento que sepa que está en el momento ideal para hacer la portabilidad.
Pues sí, de octubre a diciembre es el período ideal para dar el salto a otra operadora. Entre las razones, apuntan en ADSL Zone, es que las compañías tienen la urgente necesidad de presentar balances positivos antes de fin de año; con crecimiento en el número de abonados y de ingresos.
Las telecos se apresuran a cerrar el año con un crecimiento en número de abonados, por lo que tiran de ofertas para captar la mayor cantidad de clientes
Por ello suelen lanzar la artillería pesada de ofertas y promociones en el último trimestre del año, en una feroz competencia donde como en una pelea de box todas se preocupan por atacar pero evitando los golpes rivales.
Si se trata de afinar la puntería, las ofertas son más agresivas hacia las Navidades, donde las ofertas pueden tener hasta un 50% de descuento.
Eso sí, por más tentado se esté de tener un ahorro o cambiar de móvil por poco dinero, hay que consultar con atención la letra chica de los contratos, y estar muy atentos si se exige tener un período de permanencia.
Los meses recomendados para contratar servicio de fibra
Sin embargo, cuando se trata de otro tipo de servicios de telecomunicaciones, el momento ideal puede ser diferente.
Es el caso de la instalación de la fibra en la segunda residencia, donde las mejores ofertas se concentran antes del verano.
El motivo, aunque sea una regla no escrita, es que las telecos se esmeran en ofrecer descuentos pensando en que la gente hará un mayor uso de sus servicios en la temporada estival.
Esa misma regla de tres se aplica, con sus diferencias, en las ofertas de internet para estudiantes, que la temporada fuerte es entre septiembre y octubre; precisamente, como antesala del período de clases.
Mejores precios sin irse de la compañía
Si se trata de conseguir un mejor precio y ahorrar en la factura del móvil e internet, quizás la portabilidad no sea la mejor idea.
O sea, es mejor contactar con la empresa expresando el deseo de irnos, y al momento de escuchar las contraofertas, tener en cuenta qué propuestas tiene la compañía actual.
Es que es mucho más sencillo cambiar de tarifa que de operadora, sin correr riesgos que el servicio quede interrumpido.
Eso sí, es importante tener en cuenta que a final de mes deberían llegar dos facturas independientes, o en todo caso, con la distinción de las dos tarifas contratadas: la antigua y la nueva, con la descripción de los días de uso de una y otra.