Los médicos privados se bajan de MUFACE si Asisa y Adeslas no elevan un 150% las tarifas
Denuncian que las consultas están mal pagadas y exigen una subida acorde al coste de la vida
Funcionarios de Muface
El sistema de asistencia sanitaria de MUFACE se encuentra en una encrucijada. Los médicos autónomos que trabajan en la sanidad privada han lanzado un ultimátum a las aseguradoras que gestionan la cobertura de los funcionarios: si no se produce un incremento del 150% en sus honorarios, muchos de ellos abandonarán el sistema.
«No se puede dar por hecho que MUFACE va a seguir funcionando como hasta ahora«, advierten desde la Asociación Unión Médica Profesional (Unipromel), que representa a más de 8.000 facultativos que ejercen exclusivamente en el ámbito privado. La organización subraya que la situación actual es insostenible, ya que las tarifas que perciben los médicos llevan décadas sin actualizarse.
Honorarios congelados y consultas mal remuneradas
Según los datos de Unipromel, las tarifas que actualmente pagan las aseguradoras a los médicos están muy por debajo de lo que consideran un mínimo razonable:
- Médicos generales: Cobran entre 7 y 9 euros por consulta, cuando deberían percibir entre 25 y 30 euros.
- Especialistas: Reciben entre 15 y 20 euros, cuando su tarifa adecuada estaría entre 35 y 45 euros.
Este bajo nivel de remuneración obliga a los médicos a atender volúmenes de pacientes insostenibles para poder igualar el salario de un facultativo de la sanidad pública. Según estimaciones de Unipromel, los profesionales que trabajan con MUFACE deben recibir a entre 300 y 400 pacientes al mes para poder alcanzar un nivel de ingresos digno.
«Es inadmisible que las tarifas de las consultas privadas las fijen las aseguradoras, mientras que en la sanidad pública los precios los marca el Estado«, denuncia Ignacio Guerrero, presidente de la asociación.
Aumento del presupuesto, pero sin mejoras para los médicos
El Gobierno ha incrementado un 41,2% el presupuesto de MUFACE, alcanzando los 4.808 millones de euros. Sin embargo, este aumento no se ha traducido en una mejora de las tarifas que perciben los médicos, lo que ha generado una fuerte indignación entre el colectivo.
«Si los médicos somos los verdaderos prestadores del servicio, es inadmisible que este incremento no llegue a nuestros honorarios«, critican desde Unipromel. Reclaman que las tarifas se actualicen conforme al IPC, ya que llevan más de 30 años congeladas.
Huelga y abandono del sistema, las opciones sobre la mesa
Si Asisa y Adeslas, principales aseguradoras que gestionan la cobertura de los funcionarios, no elevan los baremos de pago, los médicos ya han anticipado sus próximos pasos:
- Convocar una huelga para visibilizar su malestar y exigir soluciones inmediatas.
- Reducir drásticamente las citas de pacientes de MUFACE, priorizando a los asegurados con tarifas más justas.
- Abandonar por completo el sistema si no hay cambios a medio y largo plazo.
«Los médicos estamos hartos de cobrar 8 euros por consulta. Si la situación no mejora, muchos compañeros no tendrán más remedio que renunciar a atender a pacientes de MUFACE», aseguran desde Unipromel.
Acciones legales contra el convenio sanitario 2025-2027
Además de las medidas de presión, la asociación médica ha decidido llevar el conflicto a los tribunales. Unipromel recurrirá ante la Audiencia Nacional el nuevo convenio sanitario de MUFACE para el período 2025-2027, siguiendo la misma estrategia que ya aplicó con los acuerdos de ISFAS (militares) y MUGEJU (jueces).
El objetivo de esta denuncia es lograr que los tribunales reconozcan el derecho de los médicos a unas tarifas justas y garantizar que las aseguradoras no impongan condiciones abusivas.
Desde la asociación aclaran que estos procedimientos no paralizarán los conciertos sanitarios, por lo que médicos y pacientes seguirán atendiendo con normalidad, pero buscan sentar un precedente legal para lograr una retribución más equitativa.
Un problema que amenaza la continuidad de MUFACE
El conflicto entre médicos y aseguradoras podría poner en riesgo el futuro de MUFACE. Si un gran número de facultativos decide abandonar el sistema, miles de funcionarios afiliados se enfrentarían a dificultades para acceder a consultas y servicios especializados.
Ante este panorama, Unipromel insta al Gobierno a intervenir y garantizar que la subida presupuestaria de MUFACE se refleje en una mejora de los honorarios médicos.
«Si no se atienden nuestras demandas, MUFACE se enfrentará a un colapso inevitable«, advierten los facultativos, dejando claro que no están dispuestos a seguir trabajando en condiciones que consideran inaceptables.