Renfe y Puente, en fuera de juego: los patrocinadores mexicanos mantienen el apoyo a Nacho Cano

La aerolínea Aeromexico mantendrá previsiblemente el convenio de colaboración, mientras que la Fundación Casa de México en España insiste que los estudiantes beneficiados del programa que participan en el evento "cumplen con todos los requisitos legales"

El productor musical Nacho Cano. Foto: Ricardo Rubio / Europa Press

El productor musical Nacho Cano. Foto: Ricardo Rubio / Europa Press

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Los patrocinadores mexicanos del del musical Malinche creado por Nacho Cano mantienen su apoyo al mismo, tras la retirada de Renfe por la detención del exmiembro de Mecano, por contratar presuntamente a inmigrantes en situación irregular para el evento, y por sus posteriores declaraciones.

Desde la aerolínea Aeroméxico apuntan que, por ahora, el convenio de colaboración con el festival «sigue activo», y que «lo más probable es que siga así».

Por otro lado, desde la Fundación Casa de México en España que, en el marco de su programa de becas, en la modalidad de formación académica, tiene un convenio con Jana Escuela Internacional de Artes Escénicas -entidad que colabora con el musical Malinche- aseguran que «los estudiantes beneficiados del programa cumplen con todos los requisitos legales«. El programa que ofrece la fundación son tres becas que cubren la matrícula dentro del programa de estudios seleccionados en un período inferior a un año.

Estrella Galicia y Herederos del Marqués de Riscal son otros de los dos patrocinadores del musical Malinche, que también cuenta con la colaboración de Entradas.com, IFEMA Madrid Live, Meyer Sound, Dolby y Netflix.

Renfe, que hasta ahora ofrecía descuentos en el precio de la entrada por ser cliente, ha decidido rescindir el acuerdo de colaboración con el musical.

Según Renfe, las declaraciones del antiguo miembro de Mecano en las que calificaba a la Policía Nacional de «criminal» les obligan a romper el contrato, pues el acuerdo establecía que las partes «podrán desistir de forma unilateral y anticipadamente de él cuando entiendan que la colaboración de la otra parte con otras entidades sea susceptible de causarle un perjuicio reputacional«.

Además, Renfe remarca que comparte «la preocupación social» en relación con la «presunta vulneración de los derechos de los trabajadores», y considera a la Policía Nacional y a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado como «uno de los pilares fundamentales del Estado de Derecho».

Policía «criminal» y actuación «coactiva»

El productor musical Nacho Cano fue detenido el martes 9 de julio por agentes de la Policía Nacional por contratar presuntamente a inmigrantes en situación irregular para su musical, que representa en Madrid desde el pasado 2022.

En concreto, se le acusa de un presunto delito contra los derechos de la población inmigrante y otro contra los derechos de los trabajadores. Tras tomarle declaración el mismo martes, quedó en libertad con cargos a la espera de una citación judicial.

Tras la detención, Nacho Cano aseguró que los motivos de su paso por comisaría y detención son su «apoyo» a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, a quien en su momento respaldó porque «mantuvo abiertos los teatros y a la ciudad viva» durante la pandemia.

Así, Cano calificó la actuación de «persecución política» y reiteró que si se va a por él, «se va a por Ayuso», además de cargar contra la actuación policial: “en una democracia de verdad, el juez decidirá si soy criminal o no, no la policía, que viene dirigida», apuntó.

Cano compareció en la rueda de prensa acompañado por dos abogados y también por 17 estudiantes que están becados por su espectáculo, según el músico, y que han estado en el centro de la polémica. «El criminal no soy yo, es a la policía a la que hay que investigar», insistió, destacando que no hizo «nada malo».

En este sentido, confirmó que ya se han puesto 17 denuncias por parte de los alumnos becados en su producción por la actuación «coactiva» de la Policía –«les llegaron a mirar los móviles»– porque espera que «quede algo de justicia». 

La versión de Cano de lo sucedido comienza con la reafirmación de que no se trata de 17 trabajadores, sino de alumnos becados -que también participan en el escenario en ocasiones como parte de esa formación- que viene de México «con todas las cuestiones legales» cumplidas.

Una vez empezado el programa de becas hace cerca de un año, se les proporciona a estos alumnos alojamiento en un hostel de Callao y a través de un programa se van incorporando al escenario. Sin embargo, sí ha reconocido que en esas primeras semanas surgieron «problemas con una persona conflictiva» y se decidió que se apartara del programa.

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