Los proveedores de Nissan ajustan plantillas
Compañías como MMM e ISS, que trabajan para el fabricante japonés, reducen el volumen de trabajadores en la fábrica por las bajas producciones
La pequeña bola de nieve comenzó a rodar por la ladera. A la espera de conocer el tamaño que alcanzarán, las bajas producciones en Nissan Barcelona ya provocaron los primeros ajustes en los primeros proveedores. El temor estaba extendido, pero hasta ahora la atonía solo había afectado a los empleados del propio fabricante. Ante la falta de expectativas en el horizonte, algunos ya aplican los primeros ajustes antes de que a partir de abril se suprima uno de los dos turnos de trabajo en la Línea 1 por la reducción de volúmenes de la furgoneta eNV200.
Según explican fuentes internas de la instalación de la Zona Franca (Barcelona) a Economía Digital, los dos primeros en actuar fueron la multinacional ISS y la compañía catalana Manufacturas Modernas de Metales (MMM). El ajuste apenas afecta a una treintena de personas, pero en el seno de la fábrica se teme que provocará un efecto contagio a proveedores de mayor envergadura como Acciona, Gestamp o Calsonic.
El primero en actuar fue ISS. La compañía fundada en Copenhague ganó el concurso de limpieza, pero como la planta funciona por debajo del 30% de su capacidad no mantendrá a la totalidad del personal encargad en el centro. La empresa detectó un excedente de plantilla por el bajo volumen y decidió recolocar o indemnizar a algo menos de 20 trabajadores que debían ocuparse del recinto barcelonés.
Abril será clave para el empleo en Nissan: la caída de la producción provocará un excedente de plantilla
Diferente decisión tomó Manufacturas Modernas de Metales (MMM). La sociedad especializada en la fabricación de tubos de freno, embragues y refrigeración tenía externalizado el trabajo en el Grupo CTC y prestaba servicios desde el interior de la fábrica. Sin embargo, las cifras provocaron un excedente en el personal de la empresa y optaron por recuperar los trabajos prestados, acabar con la subcontratada y colocar empleados propios que se quedaban sin funciones.
El recorte en las subcontratas todavía no preocupa, pero sí tiene en alerta a las diversas plantillas ante una fecha clave: abril. A partir de entonces, Nissan eliminará un turno en la Línea 1 por el recorte de la producción del 40% de la eNV200. Por ello exigen que se tomen ya las medidas necesarias para no tener que optar por decisiones «traumáticas» cuando sea evidente el excedente de personal por culpa de la furgoneta eléctrica.
Mientras, en Nissan la calma se mantiene hasta el próximo mes de mayo, cuando desaparecerá de la instalación la pick up que ensambla para Mercedes. La fábrica ya no es rentable y tendrá un excedente de personal a partir de mayo”, dijo el presidente de Nissan Europa, Gianluca de Ficchy, a la plantilla hace semanas. Sin embargo, no se espera que las decisiones se tomen inmediatamente después de dar de baja el vehículo fabricado para la marca alemana. El mismo directivo prometió que presentará un plan de futuro para el centro «antes de irse de vacaciones».
¿Y el resto de proveedores de Nissan?
Por el momento, solo ISS y MMM tomaron la decisión de recortar su despliegue en la Zona Franca. A la espera de lo que suceda en abril, otras firmas como Acciona, Gestamp y Calsonic aguardan para reducir el número de personas que presentan servicios para el fabricante japonés.
Según explican fuentes internas de la fábrica, la principal afectada de un otro golpe en el centro sería Acciona. La empresa tiene a 523 personas que prestan servicios en el interior del recinto. Son la principal partida de trabajadores externos frente al alrededor de 2.500 personas que ocupan el centro bajo un contrato firmado con la propia Nissan. El segundo proveedor en importancia dentro de las instalaciones es Calsonic, que se encarga de los tubos de escape y el frontal, con alrededor de 150 implicados.
No llegan al medio centenar de trabajadores destinados a la fábrica compañías como Tachi-S, dedicada a ensamblar estructuras de asientos; Magna, también centrada en las butacas; Snop; Howa Tramico, que colabora con los revestimientos y los techos; y MMM, centrada en tubos de escape y frenos.
La lista de afectados no se limita a las organizaciones que prestan servicios directamente en el interior de la instalación barcelonesa. El resto de los proveedores del fabricante nipón también se verán afectados, aunque aquí la factura ya se difumina más. Afectados: Faurecia –el protagonista del incendio que paralizó la fábrica de Seat el pasado noviembre–, la cotizada Gestamp, Valeo, Sumitomo, Hutchinson o Flexngate. La factura total se queda a pocos empleados de los 1.500, contabilizan las mismas voces.
Un 2020 nefasto para Nissan Barcelona
La incertidumbre reina ahora en Barcelona. De hecho, los sindicatos asumen que ni el propio Genís Alonso, director general de Nissan Motor Ibérica, conoce el porvenir de la instalación. Tras años de modelos fallidos –el último, el Nissan Pulsar- la planta ronda el 25% de su capacidad. Y partir de Semana Santa la producción de la furgoneta eléctrica eNV200 se recortará en un 40%: desde las 102 unidades hasta los 60 vehículos diarios. El ajuste se produce por un exceso de stock acumulado en los últimos meses, en los que se han producido varios incrementos de producción.
«Están dejando morir la instalación lentamente», lamentaban los sindicatos en una rueda de prensa convocada la semana pasada para protestar por las bajas producciones. Antes de recibir la nueva estocada, la plantilla ya temía por el futuro de la eNV200. El año pasado Barcelona ya perdió la NV200 de combustión, que se fabrica ahora en la planta francesa de Maubeuge utilizando la misma plataforma que la Renault Kangoo. Ahora Renault trabaja para lanzar al mercado una versión eléctrica del modelo, por lo que se especula que también emigre hacia el otro lado de los Pirineos.
El recorte de la elaboración de furgonetas se anunció solo una semana después de que De Ficchy comunicara que en mayo la planta dirá adiós a uno de los modelos que más volumen representaba en su operativa diaria: la pick up Mercedes X que ensamblaba para la compañía alemana. Ambos ajustes dejan en una quimera igualar las 60.000 unidades que la cúpula europea del fabricante japonés fijó como suelo para la instalación catalana.