Los dardos envenenados de Uriarte contra Francisco González (BBVA)
El vicepresidente y consejero delegado del BBV y del BBVA entre 1994 y 2001 cree que el error de Emilio Ybarra fue "confiar en un "farisaico colega"
La reciente muerte del expresidente del BBVA, Emilio Ybarra ha removido la historia de traiciones, victorias y derrotas que sufrió el histórico banquero en su salida de BBVA. Pedro Luis Uriarte, su mano derecha durante muchos años, lamentaba este viernes que el «gran error» de Ybarra fue «confiar en un farisaico colega que no solo le traicionó», sino que hizo todos los esfuerzos «por meter a Emilio en la cárcel y acabar con todo y todos los que le habían rodeado».
Dardos envenenados que apuntarían hacia Francisco González, que copresidió BBVA con Emilio Ybarra, y al que siempre se le ha culpado de la forma en la que ex banquero tuvo que salir de la entidad, que encumbró al gallego en presidente en solitario hasta 2018, y del proceso que vino después.
«El Banco, la Patria y mi familia». Con las mismas palabras que pronunció Ybarra al tomar el poder del BBV en 1990, Uriarte estrena las primeras líneas de la carta distribuida a varios medios de comunicación, como Expansión o El País, en la que hace balance de la gloria, la caída y el recuerdo del exbanquero.
En el emotivo y a la vez punzante escrito, Uriarte apunta que Ybarra cometió tres errores de percepción y de valoración: El primero, no saber que «el viento en la cumbre sopla muy fuerte y que, por ello, se necesita conseguir anclajes y no los tuvo». El segundo, que hay «una realidad que está al otro lado del espejo y que desde luego no es la que refleja Alicia en el País de las Maravillas, sino el caudaloso, y a veces pestilente, río de las ambiciones, los intereses, y, en definitiva, del poder”.
El tercero lo reserva, sin citarlo, a Francisco González, del que dice que no “respetó los pactos firmados” y que trató de meter a Ybarra en la cárcel. “Y acabar con todo y todos los que le habían rodeado. Sin piedad”, señala. «Hoy se la ve ya tambaleante, tras los primeros jaques, por lo que cabe deducir que por aplicación del axioma de que «quien a hierro mata, a hierro muere«, pronto caerá», sentencia Uriarte.
Emilio Ybarra al frente de la entidad
Emilio Ybarra fue uno de los artífices de la fusión de BBV y Argentaria y durante aquella etapa compartió presidencia con Francisco González, hasta que en 2001 abandonó la empresa, junto con su número dos, Pedro Luis Uriarte. La salida de Ybarra del BBVA fue, sin embargo, dura, ya que se produjo tras un escándalo por la constitución de fondos de pensiones (conocido como el caso Alico) a favor de consejeros del BBV.
Ybarra fue absuelto de los cargos de apropiación indebida por el Tribunal Supremo, tras una sentencia contraria de la Audiencia Nacional, pero el escándalo, aceleró su jubilación del banco y también la de Pedro Luis Uriarte, vicepresidente de BBVA y que, al igual que Ybarra, procedía de BBV.
En el artículo, Uriarte destaca la valía de Ybarra al frente del BBV cuando asumió la presidencia de la entidad. «El valor de BBV en Bolsa ascendió como un cohete, desde los 4.200 millones de euros que valía en aquella fecha, hasta los más de 40.000 sólo cinco años después». Además, destaca que «sus empleados pasaron de más de 22.000 a más de 90.000 y el beneficio se multiplicó por más de cinco veces».
“Con absoluta objetividad, puedo decir que pesa mucho más lo positivo que lo negativo, los aciertos que los errores, los triunfos que los fracasos”, concluye la carta.