El grupo Santana Cazorla aporta al Juez nueva documentación contra Lopesan y Eustasio López
Jesús Santos, abogado penalista estrella de Baker & McKenzie, ha presentado ante el Juzgado de Instrucción número uno de Gran Canaria el contenido de un mensaje enviado el pasado día 11 de enero por Luis Felipe Monzón, vinculado a Lopesan
Grupo Santana Cazorla ha aportado recientemente al Juzgado que ha admitido una querella contra Eustasio López, la mayor fortuna canaria, nueva documentación que mostraría un intento de modificar información financiera pública de la compañía Lopesan y participadas.
Jesús Santos, abogado penalista estrella de Baker & McKenzie, ha presentado ante el Juzgado de Instrucción número uno de Gran Canaria el contenido de un mensaje enviado el pasado día 11 de enero por Luis Felipe Monzón, vinculado a Lopesan, a Santiago Santana Cazorla, antiguo administrador y socio de Grupo Santana Cazorla.
«(…) Y si puedes corregir alguna otra cosa que… que hayas visto con posteridad, que hubo un error y tal, quitarla también para que no sea sólo de un mismo tema. Eso sería espectacular, para después nosotros hacer o levantar un acta notarial, protocolarizarlo y…», dice parte de la transcripción del mensaje en cuestión. » Y utilizarlo para el día 19 que ya van a tocar los huevos con eso», añade.
Lopesan tiene acciones valoradas en cerca de 40 millones de Sacyr, y títulos de Santander, BBVA y CaixaBank por valor de 13 millones
El mensaje de voz aportado al Juzgado, entiende la defensa de Grupo Santiago Cazorla, podría mostrar un intento de IFA Canarias (del grupo Lopesan) de modificar el contenido de documentos publicados tanto en la web de Lopesan como en la Bolsa de Frankfurt, donde cotiza una filial de la compañía turística canaria, LS Invest.
Los querellantes indican que, aparentemente, la información financiera disponible en la web de Lopesan ha sido modificada durante el mes de enero, desapareciendo de la misma informes anuales y trimestrales. Y aseguran desconocer por qué Luis Monzón envió ese mensaje a Santiago Santana Cazorla, quien después la compartió con su hijo Alberto Santana, uno de los querellantes contra Lopesan y Eustasio López.
En esos informes financieros de Lopesan y participadas, advierten, se hacía mención a la existencia de un pacto acordado en diciembre de 2021 entre Eustasio López y Manuel Santana Cazorla (que poseía el 49% del capital de Grupo Santana Cazorla), por el cual López adquiría la participación del 49% de la empresa competidora por 20 millones de euros.
Como ha publicado este periódico, ese pacto contemplaría que los dos consejeros impuestos por Eustasio López en Grupo Santana Cazorla, Juan José Arencibia y Martín Jesús Suárez Hernández, hicieran lo posible por llevar a liquidación a la compañía, que se encuentra en concurso de acreedores desde febrero de 2022.
En la documentación recientemente aportada al Juzgado, los querellantes se refieren a Luis Felipe Monzón, la persona que envía el mensaje a Santiago Santana Cazorla, como «empresario del Grupo Lopesan», tal y como ha sido descrito en diversas informaciones publicadas en relación con el caso Mediador.
Monzón, empresario y piloto de rallys, aparece involucrado en el caso por mensajes y grabaciones de Marcos Antonio Navarro (el mediador) y del general Francisco Espinosa, ejerciendo supuestamente como intermediario entre la presunta trama y una empresa.
El Juez ha citado a declarar a Eustasio López, Manuel Santana, Juan José Arancibia y Martín Jesús Suárez el próximo día 3 de abril.
Patrimonio de 1.106 millones
El grupo Lopesan es uno de los mayores conglomerados empresariales canarios, fundado en 1972, emplea a cerca de 5.000 personas en los sectores turístico, ocio, inmobiliario, construcción, energía y servicios.
La compañía cuenta con más de 17.000 camas en 22 hoteles situados en Gran Canaria, Fuerteventura, Alemania, Austria, República Dominicana y Tailandia.
De acuerdo a las cuentas consolidadas del ejercicio 2022 de Lopesan, consultadas por este diario, el grupo de Eustasio López terminó ese año con fondos propios por importe de 1.106 millones de euros, una cifra de negocio de 446 millones (233 millones en 2021), y un beneficio de 104 millones, frente a las pérdidas de cuatro millones registradas un año antes.
Las mismas cuentas mencionan una participación de Lopesan en la constructora cotizada Sacyr, 15 millones de acciones compradas en 2017 por 32,7 millones y que a finales de 2022 tenían un valor de 39,6 millones. También tiene acciones de Santander, BBVA y CaixaBank por valor de 13 millones de euros.