Las motos compartidas vuelven a Madrid, Barcelona y Valencia
El servicio de motorsharing de Ecooltra regresa tras seis semanas de estado de alarma y con las primeras medidas del fin del confinamiento en marcha
El servicio de moto compartida Ecooltra vuelve a estar disponible en las principales de España tras seis semanas de desconfinamiento por el coronavirus y con el plan de desescalada sobre la mesa.
En un comunicado, Ecooltra anuncia que su servicio desde este lunes vuelve a estar operativo para los desplazamientos de fuerza mayor, así como en los supuestos que permite el estado de alarma.
El horario para poder utilizar una de sus motocicletas va de las 6 de la mañana hasta la medianoche, entre lunes y domingo.
El estado de alarma llevó a Ecooltra, Emov, Zity y Wible a paralizar su actividad
El cese de actividad tras la activación del estado de alarma fue emprendido por otras empresas de movilidad más allá de Ecooltra. Este es el caso de Emov de Free2Move, la compañía del Grupo PSA; la firma de ‘car sharing’ Zity, y la marca Wible, de Repsol y Kia.
Otras empresas han tomado caminos alternativos. Respiro, de Seat, puso en marcha un nuevo método de arrendar sus vehículos, por lo que el cliente tiene que llamar a un número de teléfono al mes con dos horas de antelación para gestionar su reserva.
La compañía de coche compartido Share Now implementó varias medidas en Madrid para evitar la expansión del brote de coronavirus, entre las que destaca una desinfección «a fondo» de sus vehículos varias veces al día.
ERTE en empresas de movilidad
Ante el freno de los ingresos y las dificultades de acceder a liquidez, Ecooltra fue de las primeras empresas que se vio obligada a acogerse a un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) por fuerza mayor.
«Hemos notado una caída considerable de los viajes (normal, debido a la petición de confinamiento del Gobierno) y consideramos que la mejor manera de proteger nuestra plantilla, que al final es nuestra empresa, es cerrando ahora para volver dentro de unas semanas más reforzados», comentaron desde la compañía a este medio.
Otra empresa de movilidad que ajustó su plantilla fue Cabify. Además de implementar el teletrabajo entre sus trabajadores de oficina y de reorientar parte de su servicio al envío y recogida de paquetes, la compañía española congeló prácticamente todos los procesos de contratación que tenía en marcha y anunció un ERTE con suspensión parcial de contratos mediante reducción de jornada de la plantilla.
Sí mantuvo la actividad en Madrid, donde se produjo un fuerte descenso de la demanda de viajes, pero al mismo tiempo se convirtió en una alternativa para los empleados que no podían teletrabajar.