La patronal del metal catalana tantea la venta de su sede para hacer caja
El valor del inmueble llegaría hasta los 3.000 euros el metro cuadrado, capital que se destinaría a recapitalizar la organización
La patronal del metal de Catalunya necesita hacer caja. Para conseguir dinero, la dirección de la Unió Patronal Metal·lúrgica (UPM) ha planteado la venta de su sede social. El inmueble está ubicado en el tramo final de la Rambla de Barcelona, casi en la confluencia con pasaje Colón. Concretamente, en el número 2 de la calle Josep Anselm Clavé.
Fuentes inmobiliarias consultadas estiman que el metro cuadrado disponible en la zona supera los 3.000 euros. El cálculo se hace en base a los precios de mercado residencial, ya que en esa parte de la capital catalana hay pocas oficinas disponibles. Otro atractivo más para la transacción, indican los mismos interlocutores. El edificio de UPM consta de cuatro plantas y dispone de un auditorio.
Recapitalizar la institución
El plan de la dirección de la patronal, presidida por Josep Maria Pujol (Ficosa) y dirigida por Mariano Domingo, es destinar el capital de la venta a recapitalizar la institución. Arrastra problemas de tesorería desde que se descubrió que el anterior equipo de gestión había percibido sueldos presuntamente de forma ilícita de la organización empresarial.
La crisis se llevó por delante al antiguo presidente de UPM, Antoni Marsal, y a su número dos, Ángel Hermosilla. Los empresarios de la institución reclamaron a ambos ejecutivos que retornaran el capital sustraído. Primero, de forma amistosa. Más tarde, a través de los tribunales. El proceso de instrucción está abierto, pero las necesidades de caja de la organización perduran.
Nueva sede
La venta del edificio soluciona el problema económico, aunque abre otra incógnita: ¿dónde se trasladará la patronal?. Pujol y Domingo estudian varias alternativas, añaden desde su entorno. Desde arrendar una oficina en Barcelona, ya que el número de empleados que está en plantilla no requiere de un edificio entero, a instalarse en las mismas dependencias que Foment del Treball, su casa madre. La organización sectorial aún no ha tomado una decisión al respecto.
Este medio ha intentado ponerse en contacto con el director general de la patronal, quien ha declinado comentar la operación.