Pallete centra la Junta de Telefónica en el centenario para rebajar la tensión por la llegada de STC y la Sepi
La reunión anual de los accionistas llega pocos meses después de que se hayan ejecutado 3.400 despidos y este año venzan 3.700 M€ de deuda
Telefónica celebra este viernes una Junta General de Accionistas muy extraña. El presidente de la compañía, José María Álvarez-Pallete, centrará su intervención en el centenario y lo que supone para la empresa, mientras que todos los focos buscarán a STC y la Sepi para saber cómo se desenvuelven como accionistas.
Pero no son los únicos puntos calientes de la Junta de Accionistas. El pasado mes de diciembre Telefónica llevó a cabo un ERE que terminó con el despido de más de 3.000 personas. Se trata de un asunto que no estará en la agenda, y la compañía intentará que no se hable de ello.
Según ha podido conocer ECONOMÍA DIGITAL en fuentes del sector, Telefónica quiere eludir cualquier tipo de cuestión laboral durante la Junta porque asume que en 2026, una vez que acabe el actual ‘plan estratégico’, necesitará estudiar la posibilidad de realizar nuevos ajustes.
El presidente de Telefónica, sin embargo, sí querrá abordar la firma del nuevo convenio y las ventajas que finalmente han conseguido los trabajadores. Pero temas espinosos en relación a la plantilla, que todavía sigue sobredimensionada —según reconocen algunas áreas sindicales—, no tendrán cabida.
Otro tema en el que trabaja Telefónica, la deuda, estará por ver el enfoque que decide dar el presidente. El próximo año vencen 3.700 M€, y en 2025 otros 3.900 M€. Desde la compañía trabajan en una profunda restructuración del tipo de deuda para conseguir mejor financiación.
También afrontan con gran expectación cómo se desarrolla el contexto macroeconómico para saber si tendrán que tirar de fondos propios dedicados a futuras inversiones para reducir deuda si el acceso a la financiación se complica.
Telefónica, la Sepi y STC
El punto caliente —real y mediático— de la Junta de Accionistas de Telefónica estará en la comparecencia por primera vez de la Sepi y STC. El operador saudí, con un 4,9% del accionariado, representa una incógnita con respecto al significado de su voto.
Existe máxima expectación por saber si la compañía habrá desplazado a algún representante a Ronda de la Comunicación, sede de Telefónica en Madrid. Sobre su intención de voto no se esperan sorpresas en ninguno de los puntos.
No se puede decir lo mismo de la Sepi. Sobre el órgano de inversión del Gobierno existe la duda sobre su postura en la remuneración sobre el consejo, así como el bonus de 200 M€ de ganarán altos cargos directivos de la compañía.
En estos momentos posee el 3% de Telefónica, más otro 2% que tendría en derivados financieros, y ya tendría la financiación para acceder al 10%, que es el mandato que tiene del Gobierno.
Lo que no se conoce es el margen temporal que tiene para ejecutar esas acciones. Se sabe que pedirá un sillón en el Consejo de Administración, y tendrá que ser a través de una Junta Extraordinaria, pero tampoco se conoce el esquema temporal que tienen previsto.