JPMorgan financia la compra del 8% de Indra a los Escribano, segundo accionista tras la Sepi
El banco estadounidense JPMorgan ha financiado la entrada del grupo madrileño EME en Indra.
JPMorgan ha financiado a Escribano Mechanical & Engineering (EME) la compra del 8% de Indra. El banco estadounidense, de acuerdo a fuentes conocedoras de las negociaciones, ha sido la entidad asociada a los hermanos Ángel y Javier Escribano que ha financiado una operación valorada en 110 millones de euros.
La compañía madrileña adquirió el jueves 8.174.900 acciones de Indra, superando el umbral del 5% a partir del cual es obligada la comunicación a la Comisión Nacional del Mercado de Valores de la nueva participación. Los Escribano poseían ya el 3,37% del capital de la multinacional tecnológica y de defensa española.
Los hermanos Ángel y Javier Escribano Ruiz controlan cada uno de ellos el 50% de Advanced Engineering and Manufacturing, a su vez socio único de las sociedades Escribano Mechanical and Engineering y Escribano Mechanical and Engineering Investments. Estas dos últimas sociedades se reparten, respectivamente, el 3,37% y el 4,6% de Indra.
Los conflictos bélicos y la posibilidad de que Indra escinda su negocio tecnológico, Minsait, han llevado a Indra en volandas en Bolsa
Tras la compra de hasta el 8% de Indra, Ángel y Javier Escribano, presidente y consejero delegado de Escribano Mechanical & Engineering, se convierten en el segundo mayor accionista de la compañía presidida por Marc Murtra, tras la Sepi, que tiene el 28% del grupo español.
La empresa madrileña, especializada en defensa, que el pasado mes de mayo tomó el 3,37% de Indra, hace negocio en 20 países y prevé una facturación cercana a los 140 millones de euros este año.
Ángel Escribano, padre de los actuales presidente y consejero delegado, fundó la compañía a finales de los años ochenta en Coslada (Madrid). En la actualidad EME emplea a unas 700 personas y fabrica sus productos en la localidad madrileña de Alcalá de Henares.
La compañía madrileña ya colabora con Indra en la sociedad conjunta TESS, en la que también participan General Dynamics y el grupo vasco de defensa Sapa Plasencia, otro de los accionistas de Indra, con el 5% del capital. TESS trabaja en la producción der 348 vehículos de combate 8×8 para el Ejército español.
La apuesta de EME por Indra se produce en un momento de ebullición para la multinacional tecnológica y de defensa española.
El grupo dirigido por el consejero delegado José Vicente de los Mozos ha alcanzado un valor en Bolsa cercano a los 2.600 millones de euros, cotizando por encima de los 14 euros por título, la mayor valoración desde 2014.
El impulso de la industria de defensa tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia y la guerra de Gaza, ha elevado las expectativas de negocio y el valor en Bolsa de Indra. Además, la compañía española podría estudiar la escisión de su negocio tecnológico, la división Minsait.
Indra participa en el mayor proyecto de defensa europeo, el Future Combat Air System (FCAS), un súper caza con distintos sistemas integrados que requerirá una inversión de unos 100.000 millones de euros.
El grupo Dassaut, en representación de Francia, y Airbus, por parte de Alemania, son las otras compañías que lideran el proyecto de FCAS. Otras empresas tecnológicas y de defensa españolas –ITP Aero, GMV, Tecnobit, Airbus España, Sener– también están involucradas.
En los nueve primeros meses del año, Indra ha obtenido un beneficio de 146 millones de euros, un 26% más que en el mismo periodo del ejercicio anterior, y unos ingresos de 3.006 millones, un 12% más. La cartera de negocio de la compañía alcanzó en septiembre máximos históricos, 6.974 millones de euros.