José Elías, el ‘caballero blanco’ de Holaluz, pierde 130.000 clientes con Audax

La comercializadora eléctrica ha entrado en toda clase de rumores que afectan a su cartera de clientes, aunque algunos salvavidas pueden no estar a la altura

José Elías

Jose Elias, propietario y presidente de La Sirena y Audax Renovables. EFE/Alejandro García

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La situación económica que atraviesa Holaluz ha revuelto parte del sector eléctrico. Esto ha llevado a que se hagan quinielas sobre quién puede ser la compañía que salga al rescate para hacerse con su cartera de clientes, o qué inversores pueden entrar. El problema es que gran parte del sector anda con los recursos justos, o con estrategias que no han funcionado.

En pleno estallido de la crisis de la comercializadora, el diario El Confidencial publicó que José Elías, dueño de la energética Audax, se reunió con la presidenta de Holaluz, Carlota Pi. De aquel encuentro no salió nada en claro.

Se barajó la potencial entrada de José Elías como inversor de Holaluz. El empresario, a través de las redes sociales, lleva tiempo difundiendo mensajes sobre negocio y cómo gestionar las empresas. 

En la misma fecha en que se conoció la crisis de Holaluz, el propio José Elías se hizo eco sobre cómo debía ser una negociación para que tuviera éxito. Aunque el éxito es una medida relativa en todos los ámbitos. 

Según los últimos datos oficial de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), Audax tenía en España 266.000 clientes eléctricos a mediados de 2021. En esta misma fecha, en 2023, esa cifra se situó en 153.000 consumidores

En el negocio del gas, en esos dos ejercicios se pasó de 59.000 clientes a 36.000 usuarios. El cómputo general de los dos negocios arroja una pérdida de más de 136.000 consumidores en apenas dos años en el mercado español.

La supuesta entrada de José Elías en Holaluz, como ‘caballero blanco’, aunque este concepto de aplica en las contraopas, sería como inversor y no como gestor. Pero el hecho de que muchas comercializadoras independientes no sean capaces de mantener su posición de mercado es significativo de la gestión que se hace a veces.

Qué puede suceder con Holaluz 

En cuanto al futuro de Holaluz, ahora mismo tendría un problema más allá de la propia solicitud del preconcurso de acreedores. Si la compañía es inhabilitada se quedaría sin clientes. Tal y como publicó ECONOMÍA DIGITAL, en caso de que la comercializadora incumpla alguno de los requisitos que debe cumplir como empresa eléctrica, el órgano competente del Ministerio para la Transición Ecológica puede iniciar el procedimiento para inhabilitar la empresa para el ejercicio de la actividad de comercialización.  

Al procedimiento de inhabilitación se suele acumular el procedimiento de traspaso de los consumidores a las comercializadoras de último recurso (Endesa, Iberdrola, Naturgy, TotalEnergies o CHC (Repsol)), para que, en caso de que los consumidores no hubieran elegido nuevo suministrador en la fecha efectiva de cese de la comercializadora inhabilitada, no se queden sin suministro. 

El hándicap de esta situación es que debe llevarse a cabo antes de que la CNMC inhabilite a Holaluz. Según diferentes procesos similares que ha examinado este medio, la CNMC puede tardar en pronunciarse en tiempo variable. Algunos expedientes se han resuelto en poco más de tres semanas, y otras han tardado varios meses.

Si en ese tiempo no ha movido ficha con su cartera de clientes, los usuarios pasarían a las comercializadoras de referencia. Según detalle Holaluz en su balance financiero, a cierre de 2023 tenía más de 325.000 contratos eléctricos. 

Estos datos difieren las de las CUPS, que serían los puntos de suministro eléctrico, y que están por debajo de los 300.000, según la CNMC. 

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Raúl Masa

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