Jaume Roures vende su participación en Atresmedia
Imagina Media Audiovisual realiza una colocación privada entre inversores cualificados del 3,11% del capital social que tiene en Atresmedia
Jaume Roures inicia su salida de Atresmedia. El empresario catalán acaba de poner a la venta el 3,11% del capital social que le quedaba en el dueño de Antena 3 y La Sexta, después de que se desvelara que en sus cuentas reconocía que dicho paquete accionarial estaba «disponible para la venta».
«La colocación se llevará a cabo mediante un procedimiento conocido como colocación acelerada o accelerated bookbuilt offering y está previsto que tenga una duración no superior a un día», explica la compañía en un hecho relevante ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En las últimas cuentas anuales de Imagina Media, el grupo confirmaba que en 2018 se había realizado una corrección de la valoración de sus acciones en Atresmedia. Ello derivó en que dicho paquete accionarial pasara a ser clasificado como un «activo financiero disponible para su venta».
La venta se produce en medio de los rumores sobre cuándo saldrá a bolsa Mediapro. La compañía ha confirmado que su objetivo es saltar al parqué, pero no hay una fecha concreta marcada en el calendario.
El proceso de la colocación comenzará inmediatamente e Imagina Media se reserva el derecho a finalizarlo en cualquier momento. «Una vez finalizado el proceso de la colocación se hará público el resultado de la misma mediante la remisión del oportuno hecho relevante», explican desde Atresmedia. «La fecha esperada de liquidación de la colocación es el 5 de diciembre de 2019», añaden.
Roures y La Sexta
Los lazos empresariales entre Imagina y Atresmedia se remontan al año 2012, cuando se hizo efectiva la fusión entre Antena 3 y La Sexta. Pero durante los últimos años, la relación entre Roures y el propietario de La Sexta ha tenido altibajos.
Roures, en concreto la sociedad Liquid Media, vio recortado su contrato con los informativos de La Sexta. Cambiaron las condiciones y dejó de explotar el servicio íntegro de los informativos para pasar a encargarse del grafismo, el servicio de cámaras, la documentación y las delegaciones.
La decisión de La Sexta respondía únicamente a razones empresariales. El grupo mediático quería equiparar el modelo de informativos al que tiene instaurado en Antena 3, donde se gestiona internamente una parte de los servicios informativos.
