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Iberdrola anuncia un aumento del 20% en dividendos y prevé distribuir 11.000 millones hasta 2026
11.000 millones en dividendos entre 2024 y 2026: crecimiento en línea con el beneficio neto, con previsión de entre 0,61-0,66 euros por acción en 2026, y suelo de 0,55 euros (igual que el dividendo de 2023)
Iberdrola ha presentado este jueves la actualización de su plan estratégico para los próximos tres años. La compañía, dirigida por Ignacio Galán, tiene como objetivo movilizar una inversión de 41.000 millones de euros, contratar a 10.000 personas y alcanzar unos beneficios que podrían rozar los 6.000 millones de euros.
Una de las piedras angulares del plan, presentado en Londres en su día del Inversor, es el compromiso de destinar hasta 11.000 millones de euros a dividendos, reflejando el crecimiento del negocio y los resultados financieros de la compañía. Se prevé un aumento en la retribución al inversor en consonancia con el crecimiento del beneficio neto.
Iberdrola tiene como objetivo repartir entre 0,61 y 0,66 euros por acción al año para 2026, manteniendo un mínimo de 0,55 euros por acción, que coincide con el dividendo de 2023. Este nuevo objetivo de dividendo representa un aumento del 20% en comparación con la retribución de 2023, reafirmando el compromiso de la empresa con sus inversores.
Inversión en energía verde
Según las previsiones de la compañía, se espera que el beneficio bruto de explotación (EBITDA) alcance entre los 16.500 y los 17.000 millones de euros para el final del período, con un equilibrio entre los negocios de redes y renovables, cada uno aportando alrededor del 50% de este total.
Además, Iberdrola proyecta un aumento en el beneficio neto, situándose entre los 5.600 y los 5.800 millones de euros para el año 2026. Para el año anterior, 2025, la empresa ha mejorado sus estimaciones, anticipando un beneficio neto en la parte alta del rango, entre los 5.300 y los 5.400 millones de euros.
Este plan se sustenta en un modelo de financiación verde robusto, enfocado en la generación de efectivo. Iberdrola destaca su gestión activa de liquidez, una sólida estructura financiera y una alta diversificación de las fuentes de financiación, especialmente a través de la financiación verde. Se ha enfatizado que no se prevén ampliaciones de capital, y la empresa está abierta a realizar alianzas estratégicas para acelerar su crecimiento.
Como resultado de estas medidas, la compañía ha establecido la ratio del flujo de caja operativo/deuda neta por encima del 24% para 2026, superando el 23,2% registrado en 2023 y excediendo en 250 puntos básicos el objetivo establecido para 2025 en su último Plan Estratégico.
Estados Unidos el principal país para invertir en redes y renovables
Estados Unidos emerge como un foco principal de inversión, con un 35% del total planificado para los próximos tres años, seguido de cerca por el Reino Unido, España y Latinoamérica. Se prevé una inversión significativa tanto en redes como en energías renovables, con más de 21.500 millones de euros destinados a la primera y 15.500 millones de euros a la segunda.
Particularmente, en el sector de energías renovables, Iberdrola se enfocará en tecnologías flexibles y almacenamiento, con un énfasis especial en la eólica marina. Se espera un aumento del 20% en la capacidad de almacenamiento a través del bombeo, lo que ayudará a estabilizar los precios en el mercado y garantizará la seguridad energética.
Además, una parte importante de la inversión se destinará al negocio de clientes, con el objetivo de asegurar márgenes estables y ventas aseguradas hasta 2026. Este enfoque refleja el compromiso de Iberdrola con la sostenibilidad y la generación de efectivo, respaldado por una gestión activa de liquidez y una estructura financiera sólida.