Habitat pierde 39 millones y vuelve a dar activos a la banca
El auditor advierte de una incertidumbre significativa sobre la capacidad del grupo para continuar sus operaciones y liquidar los pasivos
La promotora barcelonesa Habitat, controlada por la familia Figueras, ha entregado este año a las entidades crediticias diversos inmuebles para cancelar deudas, mientras sigue negociando trasiegos del mismo género con otros acreedores bancarios. Ello ocurre tres años después de que lograra salir de la suspensión de pagos, presentada en 2008 con un pasivo de 2.000 millones de euros.
La situación real de Habitat era y sigue siendo de quiebra, dado que sus activos son muy inferiores a las deudas que embalsa el balance. Si no ha desembocado en liquidación es porque a los intermediarios del dinero les saldría más costosa la factura. En estas circunstancias, lo mejor es ir dando hilo a la cometa a la espera del cambio de ciclo.
Continuidad de las operaciones
Un año más, el auditor que ha revisado el balance consolidado de 2013 advierte de una incertidumbre significativa sobre la capacidad de Habitat para continuar sus operaciones y liquidar los pasivos. Entre otros factores negativos cita el abultado signo negativo de los recursos propios, que alcanza los 616 millones; las fuertes pérdidas en que viene incurriendo el grupo desde 2007; la elevada deuda y las crecientes dificultades de amortización; y un mercado declinante.
Habitat cuenta con un activo consolidado de 564 millones. En él se incluye una tesorería de 80 millones y unas existencias por valor de 430 millones, de las que dos tercios son solares y terrenos y el resto promociones en curso y edificios de oficinas terminados. El otro platillo de la balanza son los pasivos financieros, que ascienden a la friolera de 1.124 millones. De éstos, casi 400 millones se convirtieron en créditos participativos a raíz del convenio judicial.
Cuenta de resultados
Habitat facturó el pasado año 33 millones, frente a los 40 millones de 2012. La cifra está a años luz de los 848 millones que alcanzó en 2007, cifra récord en los anales de la casa. Del giro de 2013, el 56% fueron daciones en pago acordadas con los bancos. La cuenta de resultados arrojó un déficit de explotación de 97 millones. La pérdida final se comprimió de 102 a 39 millones.
Grupo Habitat ha cerrado todos sus ejercicios con signo negativo desde 2007. La única excepción fue 2010, cuando se contabilizaron las quitas del convenio y otros acuerdos de refinanciación. El quebranto acumulado en este septenio negro asciende a 1.050 millones de euros.
Sin noticias de los minoritarios
La junta de accionistas, celebrada el pasado 27 de junio, contó con la asistencia de los hermanos Bruno, Virginia, Berta y Carlos Figueras Costa, así como los representantes de la constructora madrileña Ferrovial, titular del 20% del capital. No hicieron acto de presencia Isak Andic, Emilio Cuatrecasas, Dolores Ortega (sobrina de Amancio Ortega), José Antonio Castro Sousa y la familia Rodés. Todos ellos entraron en Habitat en 2007, a raíz de la compra de Ferrovial Inmobiliaria, mediante el desembolso de 155 millones de euros, que les otorgó el control del 25% de Habitat.
Al sobrevenir el pinchazo de la burbuja, los cinco demandaron a la empresa para reclamar la devolución de su inversión. La Audiencia de Barcelona rechazó el año pasado sus pretensiones y dio la razón a Habitat.