Emilio Cuatrecasas pasa el testigo de su bufete a Rafael Fontana, su relevo natural
El hasta ahora consejero delegado del despacho asume también las funciones de presidente
Emilio Cuatrecasas deja la presidencia de su bufete. El abogado, que mantendrá sus funciones derivadas como socio del despacho, da un paso atrás en el día a día de la firma. El testigo lo recoge Rafael Fontana, su relevo natural, que hasta ahora había ejercido el papel de consejero delegado. El nuevo presidente mantendrá su anterior cargo.
La cesión de poderes tuvo lugar el pasado 23 de julio durante el último consejo de administración celebrado. No obstante, el relevo empezó mucho antes. Hace dos años el bufete nombró a Fontana consejero delegado, cargo inexistente hasta la fecha. La compañía define el paso atrás de Cuatrecasas como un proceso de sucesión e institucionalización.
Pieza clave en la expansión
Fontana ha sido un directivo clave en la expansión de la firma. El bufete destaca sus labores en la configuración tanto en los servicios completos de asesoría jurídica como en la propia reorganización interna de otras áreas. Su vínculo con la compañía viene de lejos. Entró en el despacho como experto fiscal en 1983. Posteriormente, en 2001, fue nombrado director general.
Emilio Cuatrecasas continuará como socio en la firma que fundó en 1917 su abuelo, Emilio Cuatrecasas Buquet. Actualmente, cuenta con 202 socios y 962 abogados en las 25 oficinas que tiene repartidas en 11 países del mundo. “Me siento muy orgulloso de lo que hemos conseguido a lo largo de todos estos años y muy afortunado por haber podido contribuir en cada detalle del desarrollo del despacho”, ha argumentado el letrado.
En 2013, Cuatrecasas cerró con un facturación de 248 millones de euros. Supone una cifra el 1% superior a la de un año antes.