Grifols aguanta la segunda embestida de Gotham y baja solo un 0,36% en bolsa

Grifols aguanta el segundo ataque de Gotham. La farmacéutica catalana ha visto como su valor en bolsa bajaba solo un 0,36% este martes, pese a la reaparición de la firma bajista, que ha publicado un segundo comunicado en el que ha vuelto a pedir a la catalana que aclare su relación con Scranton, el holding holandés participada por miembros de la familia Grífols que posee el 8% de sus acciones.

Los títulos de la empresa presidida por Thomas Glanzmann han cerrado la sesión bursátil de este martes con un precio de 10,93 euros por acción, lo que supone una leve caída respecto al valor registrado el pasado lunes, de 10,97 euros. Con ese precio, la capitalización bursátil del grupo farmacéutico que cotiza en el Ibex alcanza los 6.730 millones de euros.

Este incremento llega tras una jornada tumultuosa para Grifols. La empresa se despertaba este martes con otra publicación de Gotham, que hundió su cotización en un 35% a principios de enero después de publicar un informe en el que le acusa de engordar su ebitda y reducir su deuda mediante operaciones vinculadas con Scranton.

Siete dardos

En este nuevo documento, mucho más conciso que el primero, la sociedad de Daniel Yu lanza siete preguntas a Grifols sobre sus relaciones con la patrimonial. La bajista vuelve a cuestionar por qué ambas empresas consolidan los resultados de Haema y BPC, dos proveedores de plasma que Grifols compró en 2018 y que seguidamente vendió a Scranton. Grifols ya ha repetido en varias ocasiones que incluye las cifras de las dos compañías en sus cuentas porque retiene el control y un derecho exclusivo de recompra, algo validado por las Normas Internacionales de Contabilidad (NIC).

Por otro lado, Gotham ha pedido a Grifols que aclare si, realmente, la relación entre la farmacéutica y Scranton se limita al alquiler de la sede de la empresa y a los contratos para comprar plasma a Haema y BPC, tal y como dijo Glanzmann en una conferencia con inversores para esclarecer las acusaciones de la bajista; mientras que ha exigido saber cuál es la participación de la familia en la patrimonial holandesa.

Gotham también ha requerido conocer los detalles de algunas operaciones con partes vinculadas incluidas en las cuentas semestrales del grupo cerradas el pasado junio de 2023. Por último, ha retado a la empresa catalana a contratar un forense contable que investigue sus prácticas contables y comerciales.

Con la reaparición de la inversora, las acciones de la compañía especializada en la fabricación de medicamentos a base de plasma han llegado a caer hasta un 7,5%. Sin embargo, Grifols ha reaccionado con un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en el que ha vuelto a desmentir las «insinuaciones malintencionadas, falsas y engañosas de Gotham, que tienen como único objetivo desestabilizar a Grifols y generar dudas entre sus inversores institucionales». «La Sociedad ha abordado cada una de sus preguntas malintencionadas y engañosas», recalca la catalana.

Tras el comunicado, las acciones de Grifols han retomado la senda alcista consiguiendo mantener la cotización del día anterior. Gotham incluye en su publicación una advertencia legal en el que asegura tener una posición corta en la biofarmacéutica a través de «filiales o personas relacionadas», por lo que no sería de extrañar que quisiera volver a bajar la cotización del grupo para sacar tajada, después de semanas en positivo. Dicha posición no figura en los registros de la CNMV, por lo que debe de ser inferior a 0,5%.

La demanda y la CNMV

El nuevo informe de Gotham ha sido el último capítulo de la guerra que ambas empresas arrastran desde que la empresa estadounidense publicó sus duras acusaciones el día 9 de febrero. Hasta ahora, la última novedad era que Grifols había presentado una demanda contra Gotham, Yu, GIP, su fondo aliado que tomó la posición bajista, y su administrador Cyrus de Weck en el Tribunal Distrito Sur de Nueva York por difamación, interferencia y enriquecimiento injusto.

Ni Gotham ni sus socios se han pronunciado sobre la batalla legal, ni en redes sociales, donde difunde sus informes, ni en el comunicado remitido este martes.

Mientras la maquinaria legal avanza, ambas empresas están atentas a la CNMV. El regulador bursátil requirió información a Grifols, precisamente sobre su relación con Scranton, para esclarecer si las demandas del conocido como Batman de Wall Street tienen fundamento. Con todo el expediente en su mesa, la organización está avaluando toda la información y ya alertó que podría alargarse semanas, aunque avisó que, a priori, parecía que la farmacéutica había actuado siempre según marca la normativa.