Grifols pagó una indemnización de 5 millones de euros a Steven Mayer tras dimitir como presidente

Grifols pagó una indemnización de 5 millones de euros a Steven Mayer, el primer presidente ejecutivo del grupo catalán ajeno a la familia fundadora que ocupó el cargo durante apenas cuatro meses, tras su dimisión, según figura en el Informe sobre remuneraciones de los consejeros publicado por la empresa en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La farmacéutica nombró a Mayer como presidente en octubre de 2022, después de tener una silla en el consejo desde 2011. En su currículum, figuraba una amplia experiencia en el sector de los medicamentos basados en plasma. De hecho, fue directivo de Telacris, la empresa que catapultó el salto de Grifols a Estados Unidos, cuando la compró en 2011. Fue este movimiento el que llevó al directivo a tener un puesto en el órgano decisorio.

Su ascenso a presidente simbolizó el inició de la profesionalización de Grifols, pero su tiempo en la primera línea de la empresa fue corto. En febrero de 2023, dimitió del cargo «por motivos de salud». Tras su salida, una de las filiales estadounidense de la farmacéutica, Grifols Shared Services North America, fue la encargada de abonarle estos 5 millones de euros, dado que era la empresa con quien mantenía una relación contractual.

Glanzmann le sustituye y sobra casi 2M

Thomas Glanzmann, actual presidente de la empresa, fue el encargado de sustituirle, a la vez que absorbió las funciones de consejero delegado. Hasta entonces, Víctor Grifols Deu y Raimon Grifols ejercían como coCEOs. Por esas fechas, pasaron a ser director de operaciones y director general corporativo respectivamente, hasta que el pasado mes de febrero Grifols decidió apartar de una vez por todas la familia fundadora de la gestión operativa de la empresa.

En el informe de gobierno corporativo también figura las remuneraciones que recibió el resto de la cúpula de Grifols por ser miembros del consejo de administración. Glanzmann percibió un sueldo de 1,09 millones de euros por su trabajo como presidente y CEO, al que se le suman 833.000 euros en retribuciones variables, de modo que cobró un total de 1,9 millones de euros. El año anterior, cuando solamente era consejero, fue remunerado con 150.000 euros.

Raimon Grifols y Víctor Grifols Deu recibieron 940.000 euros procedentes de su sueldo base, un 5% más que en 2022, a los que hay que sumar 760.000 procedentes de retribuciones variables. En total, se embolsaron 1,7 millones de euros cada uno, 700.000 más que en 2022. Estas cifras incluyen la retribución percibida por sus funciones ejecutivas, como director general y director de operaciones.

Tomás Dagá, consejero de la máxima confianza de los Grifols, no percibió ni un euro por su puesto de consejero externo, mientras que Albert Grifols, el tercer miembro de la familia con silla en el órgano colegiado, tampoco recibió ni un pago, puesto que fue nombrado a finales de diciembre de 2023. De hecho sustituyó al presidente de honor, Víctor Grifols Roura, que cobró 965.000 euros en su último año como consejero, lo mismo que en 2022.

Por último, los seis consejeros independientes de Grifols se embolsaron 100.000 euros por cabeza, un dato al que hay que sumarlo 25.000 más si tienen presencia en alguna comisión del consejo.