Ferrovial cumple un año de su traslado a Países Bajos entre peleas con el Gobierno y beneficios fiscales
Desde que la compañía de Rafael de Pino se instaló en Ámsterdam ha tenido un debut positivo pero modesto en la bolsa neerlandesa y consumó su esperado salto a Wall Street
Ferrovial celebra este 16 de junio su primer aniversario con sede en Países Bajos, tras un controvertido traslado que generó una fuerte oposición por parte del Gobierno y que incluyó su debut en la Bolsa de Ámsterdam, donde ha tenido una negociación muy modesta durante este período.
El grupo, presidido por Rafael del Pino, anunció a finales de febrero del año pasado su intención de mover su sede social de España a Países Bajos, comenzando a cotizar en bolsa allí, como paso previo para hacerlo en la bolsa de Nueva York, el principal objetivo del grupo fundado en Madrid en 1952.
La operación se llevó a cabo mediante una fusión en la que la sociedad matriz del grupo, Ferrovial, fue absorbida por su filial Ferrovial International (FISE). A partir de entonces, la denominación social y comercial del grupo pasó a ser Ferrovial SE.
Los fallidos intentos del Gobierno
En su traslado, que coincidió con la proximidad de las elecciones autonómicas y municipales, Ferrovial se enfrentó directamente con el Gobierno, que trató de disuadir al grupo de sus planes (considerados sin justificación económica) y propuso que salieran a la Bolsa de Nueva York sin cambiar su sede en España.
De hecho, el presidente Pedro Sánchez acusó a Rafael del Pino de no ser un empresario comprometido con su país y de buscar beneficios fiscales con el traslado.
Tras el intercambio de acusaciones y la persistencia de Ferrovial en trasladar su sede a Países Bajos para facilitar su salida a Bolsa en EE. UU., argumentando que era el camino más seguro y conocido, fueron finalmente los accionistas quienes, el 13 de abril, aprobaron con una amplia mayoría los planes de traslado de la compañía.
El grupo, con más de 24.800 empleados, pagó en España durante 2023 un total de 305 millones de euros en impuestos (tanto sobre beneficios y otros derivados de su actividad, como recaudados y pagados por cuenta de terceros), lo que supone un 8 % más que en 2022. En concreto, el grupo pagó 152 millones en impuestos directos (sobre beneficios y otros), un 20,6 % más que el año anterior, solo superado por Estados Unidos, donde abonaron 208 millones.
Desde su debut en la bolsa neerlandesa, a la que ingresó a 29,98 euros por acción, los títulos de Ferrovial se han revalorizado cerca del 21 %, aunque el volumen de negociación ha sido muy reducido.
El debut en Wall Street
Once meses más tarde, el 9 de mayo de este año, Ferrovial debutó en la bolsa estadounidense, convirtiéndose en la primera empresa del IBEX 35 en cotizar en Wall Street con sus acciones ordinarias, a diferencia de los ADR que utilizan otros grupos españoles como Santander, BBVA o Inditex.
Desde hace más de un mes, Ferrovial cotiza simultáneamente en tres mercados (España, Países Bajos y Estados Unidos), aunque no se descarta que en el futuro el grupo opte por cotizar únicamente en Nueva York y en el IBEX 35.
Con su entrada en el Nasdaq, a un precio de salida de 47,2 dólares por acción, el grupo busca potenciar su capacidad para atraer nuevos inversores internacionales, así como aumentar su liquidez y recursos para afrontar nuevos proyectos de infraestructuras en Estados Unidos, su principal mercado y foco de inversión.
Ferrovial tiene presencia en Estados Unidos desde hace más de 20 años, operando activos en Texas, Virginia y Carolina del Norte, además de estar desarrollando la nueva terminal 1 del aeropuerto JFK de Nueva York.
El grupo espera obtener dividendos de 2.200 millones de euros procedentes de su actual cartera de activos (excluyendo Heathrow) entre 2024 y 2026, cuando finaliza su actual plan estratégico, y distribuir 1.700 millones a sus accionistas durante ese mismo periodo.