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Ángel Escribano borra en Indra el rastro de Javier Monzón: «Podemos dejar que nos ataquen y darles queso y chorizo»
El nuevo presidente de Indra, Ángel Escribano, no tiene complejos a la hora de definir a Indra como una compañía de defensa, y no tecnológica como se empeño durante dos décadas Javier Monzón.
Ángel Escribano, presidente de Indra.
Ángel Escribano ha quitado de un plumazo los complejos y prejuicios que durante la larga etapa de Javier Monzón como presidente de Indra han pesado sobre la compañía por identificarse con la industria militar.
El nuevo presidente de la multinacional española, primer accionista a título particular, colocado en el puesto por la Sepi (el Gobierno) en sustitución de Marc Murtra, habla ya de Indra como una compañía de defensa, de armamento. Sin el añadido de ‘y tecnológica’.
«Podemos dejar que nos ataquen y les damos jamón y queso, o podemos defendernos«, comentó el miércoles Escribano en la presentación de los resultados del grupo del ejercicio 2024.
Durante los 22 años que Javier Monzón presidió Indra, entre 1993 y 2015, el actual ejecutivo del Santander se empeñó en que la compañía española fuera no solo un grupo de defensa, sino también, y principalmente, tecnológico.
La tecnología de la información fue el ámbito donde se fraguó el nacimiento de Indra, tras la fusión de Ceselsa e Inisel, una operación pilotada a principios de los años noventa por un joven Javier Monzón.
En 2006, la Indra de Monzón acometió la compra de las consultoras Soluziona, a Unión Fenosa, y Azertia, a Corporación IBV (Iberdrola y BBVA).
Indra lleva dos años tratando de vender Minsait, con más de 40.000 empleados, sin éxito
Dos adquisiciones valoradas en cerca de 400 millones de euros y que prácticamente doblaron la plantilla, hasta los 20.000 empleados. Y que intensificó el carácter tecnológico de Indra en detrimento del militar, atribuido por los constantes y millonarios contratos logrados por el grupo con el Ministerio de Defensa.
De aquella apuesta por la consultoría y la tecnología proviene Minsait, la división creada por Indra en 2016, estando ya el grupo presidido por Fernando Abril-Martorell.
En la actualidad, Minsait aporta a Indra sus mayores ingresos, más de 2.000 millones anualmente, pero también supone una fuerte carga de costes laborales.
Queso y chorizo
Bajo la presidencia de Marc Murtra en Indra, entre mediados de 2021 y el pasado mes, la compañía ha sumado a su capital otras dos empresas españolas de armamento, la madrileña Escribano Mechanical & Engineering, y la vasca Sapa Plasencia, en un primer intento de una anhelada concentración de la industria de defensa española.
Los hermanos Ángel y Javier Escribano se convirtieron a finales del pasado año en los primeros accionistas de Indra tras la Sepi, alcanzando el 14% del capital a través de Escribano Mechanical & Engineering, hipotecando parte de su grupo industrial familiar.
El mes pasado Ángel Escribano fue designado presidente de Indra en sustitución de Murtra, colocado por la Sepi en la presidencia de Telefónica. El rastro de la Indra tecnológica de Javier Monzón está a punto de desaparecer.
«Si disfrutamos del estado del bienestar es gracias a que alguien que pueda tener la mala intención de quitárnoslo sabe que no puede hacerlo porque estamos preparados para repelerlo», dice Ángel Escribano
Minsait lleva al menos dos años en venta, pero el grupo no ha logrado todavía encontrar un comprador capaz de asumir una plantilla formada por más de 40.000 empleados.
Preguntado el miércoles sobre la venta de Minsait, y si Indra es ahora una empresa de armamento, Escribano precisó: «No, Indra no es una empresa de ataque, la munición no es un ataque, es una defensa«. «Podemos dejar que nos ataquen y que nos tiren algo y les damos jamón y queso, o podemos defendernos«, dijo.
«Indra participa en la defensa y en el estado del bienestar que queremos todos», comentó el nuevo presidente de Indra. «Cuando estamos en una terraza de un bar o en una playa, es gracias a que alguien que puede tener la mala intención de quitárnoslo sabe que no puede hacerlo porque estamos preparados para repelerlo, pero claro, si le vamos a dar pan y mantequilla…».
«Siendo egoísta, aumentar el 2% el gasto en defensa… Me gustaría que fuera más, hay que ser realistas, nos amoldaremos a lo que haya», dijo el miércoles Ángel Escribano en su primera presentación de resultados como presidente del grupo.
El presidente de Indra aseguró el miércoles que la compañía no está negociando con Telefónica la venta de Minsait y que, en estos momentos, no mantiene relación comercial alguna con Israel.