El coronavirus costará a El Corte Inglés 4.400 millones
Moody's mantiene el rating de los grandes almacenes pero lo deja en perspectiva negativa por el impacto de la pandemia en sus números
El golpe del coronavirus a El Corte Inglés comienza a tomar forma. La agencia de calificación Moody’s reveló que, según sus cálculos, los grandes almacenes perderán aproximadamente un tercio de sus ventas anuales por el impacto de la pandemia. Por ello, la firma de análisis cambió la perspectiva de su valoración a negativa a pesar de que confirmó el rating de Ba1.
A través de una nota, Moody’s celebró el «sólido desempeño de la compañía en su división de supermercados y en las ventas online» durante el estado de alarma. No obstante, el cerrozajo y la probable caída del consumo posterior dejarán a la compañía sin un tercio de sus ingresos en el ejercicio fiscal 2020/2021.
El desplome de ventas de El Corte Inglés rondará los 4.400 millones de euros. A pesar de que se augura una recuperación de la división comercial, tal y como anticipó Economía Digital, al menos la mita de la factura procederá de la agencia de viajes, la única división del grupo que todavía no ha levantado el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) presentado en primavera para todo el conglomerado.
Fuentes internas de la compañía explicaban a este medio que la caída de la facturación de los centros comerciales rondaba el 50% de su volumen normal al cierre del mes de mayo. No obstante, la entrada en la fase de 2 de Cataluña y Madrid –donde la empresa aglutina mayor músculo– redujo la caída al 40% gracias al fin de las limitaciones de espacio de las tiendas.
Durante el estado de alarma, las ventas de El Corte Inglés cayeron al 35% de su nivel habitual
Los cálculos más optimistas hablan de unas pérdidas de 500 millones de euros al cierre del ejercicio 2020/2021; una realidad muy distinta a los 310 millones de beneficios registrados en la temporada 2019/2020. El principal sostén será una renovada página web y los supermercados, que resistieron durante todo el estado de alarma para mantener la facturación al 35% de su nivel habitual.
Eso sí, de momento la recuperación es desigual. «La sala hipermercado y los centros comerciales de las afueras son los que mejor respondieron», señalan las mismas voces.
En cambio, en los establecimientos de Castellana y Preciados (Madrid) y plaza Cataluña (Barcelona) la vuelta a la normalidad es más débil al ser mucho más dependientes del turismo. A la falta de visitantes se suma otro factor: al haberse impuesto el teletrabajo en muchas de las empresas, los oficinas del centro de las ciudades están vacías por lo que hay muchos menos empleados que acudan a los centros comerciales una vez terminado su horario de trabajo.
Moody’s estrecha el cerco a El Corte Inglés
Con las cifras en la mano, Moody’s decidió mantener la calificación de Ba1 a la compañía, aunque cambió la perspectiva a negativa por la coyuntura actual. Más allá de las ventas, la agencia valoró la reducción de la deuda acometida antes de la pandemia, que redujo el ratio deuda/ebitda a 3,1 veces al cierre del ejercicio anterior.
Es oxígeno suficiente para afrontar para afrontar con garantía el crédito anticoronavirus de 1.311 millones que le concedieron 14 bancos al inicio de la crisis. «El ratio deuda/ebitda subirá a 4 veces en el plazo de 12 a 18 meses», comparó la firma.
Pero más allá de poner el foco en la deuda, Moody’s celebró que El Corte Inglés haya reducido los costes por la caída de los ingresos con acciones como el ERTE para buena parte de la plantilla que aplicó en las primeras semanas del estado de alarma. «La recuperación dependerá de una vuelta fuerte y constante de la demanda de los consumidores españoles y una reducción continua en los contagios», zanjó la empresa de calificación.